Nota informativa
Autoridades y representantes de 14 Estados miembros y 10 miembros asociados del Caribe, y cinco Estados miembros de América Latina, además de especialistas de organismos subregionales y internacionales y otros expertos, asistieron a la Vigésima reunión del Comité de Monitoreo del Comité de Desarrollo y Cooperación del Caribe (CDCC, por sus siglas en inglés), órgano subsidiario de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), en la cual destacaron las estrategias necesarias para apoyar la recuperación pospandemia mediante mayor solidaridad e integración regionales.
En la reunión, los participantes debatieron sobre los desafíos multidimensionales que siguen enfrentando los Estados del Caribe y que definen su vulnerabilidad, y consideraron soluciones innovadoras en materia financiera, tecnológica e institucional para acelerar la recuperación y fortalecer la resiliencia económica en la subregión.
El encuentro fue inaugurado por Alicia Bárcena, Secretaria Ejecutiva de la CEPAL; Christian Guillermet-Fernández, Ministro de Relaciones Exteriores y Culto a.i. de Costa Rica -en su calidad de representante del país que ejerce actualmente la presidencia de la CEPAL-; y Camillo Gonsalves, Ministro de Finanzas, Planificación Económica y Tecnología de la Información de San Vicente y las Granadinas, quien preside el CDCC.
En sus distintas sesiones, la 20ª reunión del Comité de Monitoreo del CDCC revisó un documento de trabajo preliminar presentado por la CEPAL bajo el título Reckoning with COVID-19: pursuing a people-centered recovery and more resilient future for the Caribbean (disponible solo en inglés), trató las estrategias para apoyar la recuperación mediante la solidaridad y la integración regionales, y cómo proteger la salud del Caribe. También se revisó un reporte sobre la implementación del programa de trabajo 2020 para el Caribe y se definió la fecha y lugar del vigesimonoveno período de sesiones del CDCC.
En sus palabras de apertura, la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena, señaló que esta reunión ofrece a los países de la subregión la oportunidad de reflexionar sobre los temas más apremiantes del desarrollo. “La CEPAL está plenamente comprometida con la implementación de la estrategia ‘El Caribe Primero’. Estamos haciendo todo lo posible para que las necesidades y los intereses del Caribe ocupen un lugar destacado en nuestro trabajo”, recalcó.
También agregó que la comunidad internacional coincide en que la amenaza del cambio climático para los pequeños Estados insulares en desarrollo (PEID) es incuestionable. “Por ello, algunas de las voces más contundentes que han exigido un liderazgo moral y estratégico en la acción climática en la 26⁰ Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP 26) provienen del Caribe”, resaltó.
Por su parte, el Ministro de Relaciones Exteriores y Culto a.i. de Costa Rica, Christian Guillermet-Fernández, reafirmó la estrategia “El Caribe Primero” impulsada por la CEPAL y señaló que su país tiene la fuerte convicción de que por medio de una colaboración más cercana y una mayor integración en América Latina y el Caribe todos podremos salir adelante. Su intervención fue considerada de gran relevancia, ya que se trató de la primera vez en que un país de América Latina que ostenta la presidencia pro témpore de la CEPAL participa de manera central en una reunión del Comité de Monitoreo del CDCC.
“Los problemas estructurales que han prevalecido por mucho tiempo en nuestra región y que han sido agravados por la pandemia y por los efectos del cambio climático, solo podremos abordarlos de forma adecuada por medio de soluciones sociales y económicas transformadoras, basadas en los principios de la solidaridad y de cooperación internacional, en sus distintas modalidades”, enfatizó el Canciller a.i. de Costa Rica.
En tanto, el Ministro de Finanzas, Planificación Económica y Tecnología de la Información de San Vicente y las Granadinas, Camillo Gonsalves, llamó a no mirar hacia atrás en busca de un statu quo pasado, sino hacerlo hacia adelante, con la historia como guía y no como destino. “Debemos acelerar la integración regional y no pausar la integración dentro de la región del Caribe”, declaró.
“El COVID-19 ha sido una de las peores épocas económicas en las historias individuales de los países de la región del Caribe. Muchos de los países dependientes del turismo en el Caribe han sido golpeados económicamente de una manera sin precedentes, sin contar los desafíos relacionados a la deuda, a las amenazas existenciales provocadas por el cambio climático y los impactos de los desastres, como este año con la erupción del Volcán La Soufrière en mi país”, enfatizó.
En su presentación del documento sobre la recuperación pos-COVID-19 en el Caribe, Alicia Bárcena destacó que el Caribe enfrenta una triple crisis, desencadenada por fenómenos climáticos, agravada por el COVID-19, que provoca una angustia económica y financiera creciente. “Enfrentamos un prolongado desastre sanitario que evidencia las desigualdades estructurales de América Latina y el Caribe”, señaló.
Con relación a las enfermedades no transmisibles (ENT) -tema que fue objeto de un seminario especial realizado el jueves 4 de noviembre- indicó que el Caribe es una de las subregiones con mayor prevalencia de ENT y que la pandemia ha tensionado los sistemas de salud y pone de manifiesto limitaciones sistémicas para manejar emergencias de salud pública como las pandemias.
Agregó que las proyecciones de la CEPAL indican que en 2021 el Caribe crecerá 4,1% y 7,8% en 2022. El empleo y los ingresos reales de los hogares no volverán a los niveles previos a la pandemia a corto y mediano plazo, lo que dará lugar a menores estándares de vida durante varios años.
“Observamos una ‘crisis sobre crisis’ en el Caribe. Urge un índice de vulnerabilidad que nos permita entender mejor el carácter multidimensional de los problemas que enfrenta la subregión… Para construir un nuevo futuro, el Caribe necesita fortalecer la seguridad alimentaria, promover la diversificación económica, fortalecer la gestión de desastres, mejorar la protección social y reforzar la infraestructura de salud para la respuesta al COVID-19”, explicó Bárcena.
“La pandemia puede hacer de esta crisis una oportunidad para alinear las políticas, con el fin de cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), sin dejar a nadie atrás. La cooperación y el multilateralismo para el desarrollo regional, el financiamiento y el alivio de la deuda, es el camino correcto”, remarcó.
La presentación de la Secretaria Ejecutiva fue comentada por Ashni Singh, Ministro de Finanzas de la República Cooperativa de Guyana, quien mostró su satisfacción con el nivel de atención hacia los pequeños Estados del Caribe por parte de la CEPAL y a los retos particulares que enfrentan. “Debemos conversar con la comunidad internacional sobre los recursos asequibles para construir una infraestructura sostenible”, indicó.
En una intervención posterior realizada por Christian Guillermet-Fernández durante la sesión sobre el apoyo a la recuperación mediante la solidaridad y la integración regionales, el Ministro de Relaciones Exteriores y Culto a.i. de Costa Rica recalcó que los mecanismos de financiamiento innovadores como el Fondo de Resiliencia para el Caribe -propuesto por la CEPAL-, y la inclusión de cláusulas sobre eventos como pandemias y huracanes como parte de disposiciones de préstamos, van en la dirección correcta.
A continuación, la Directora Ejecutiva de la Agencia de Salud Pública del Caribe (CARPHA, por sus siglas en inglés), Joy St. John, presentó las conclusiones del seminario sobre enfermedades no transmisibles, efectuado en la víspera.
Posteriormente, la Directora de la Sede Subregional de la CEPAL para el Caribe, Diane Quarless, entregó el informe sobre el programa de trabajo 2020 para el Caribe, en el cual detalló las actividades subregionales efectuadas el año pasado, las que tuvieron énfasis en la respuesta al impacto del COVID-19, en particular en avanzar en el diseño del Fondo de Resiliencia para el Caribe de la CEPAL -que será lanzado el próximo año- a fin de promover la recuperación económica y la inversión en adaptación y transformación económica, al tiempo que se exploraron medidas para promover las estrategias de alivio de la deuda de los Estados del Caribe.
Al cierre del evento, la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL reforzó la noción de que el CDCC es el órgano intergubernamental por excelencia del Caribe, e indicó que “continuaremos promoviendo la diversificación productiva, la economía ‘verde’ y ‘azul’, avanzando en encontrar soluciones financieras y hacia un índice de vulnerabilidad, para reemplazar el PIB per cápita como herramienta de medición del desarrollo. También hacia las tecnologías de información y un transporte sostenible. Y mantendremos nuestros esfuerzos para colaborar con la Comunidad del Caribe (CARICOM) y todas las organizaciones subregionales que trabajan en el Caribe”.
Por su parte, el Ministro Camillo Gonsalves agradeció a todos los delegados, participantes y en especial a la CEPAL por su trabajo. “Esta ha sido una reunión muy productiva; tenemos un buen programa de trabajo para el próximo año y espero que podamos avanzar en la creación de un índice de vulnerabilidad multidimensional para nuestra región”, señaló.
Al final del encuentro los delegados aprobaron que la 29⁰ período de sesiones del Comité de Desarrollo y Cooperación del Caribe (CDCC) se efectúe en Suriname, de acuerdo con la rotación alfabética de los países miembros (según sus nombres en inglés), en una fecha aún por determinar, pero que será previa a la realización del 39⁰ Período de Sesiones de la CEPAL (a realizarse en 2022).