Descripción
No es novedad afirmar que la educación es un paso importante para garantizar la apertura a mejores oportunidades de desarrollo personal y social. En ese sentido, en los países de América Latina y el Caribe existen avances significativos, sobre todo, en materia de paridad de género, cobertura y expansión educativa. Esos avances deben, sin embargo, acompañarse de mejoras sustanciales para que todos los niños y todas las niñas dispongan de una educación de calidad, adaptada a sus necesidades y a las exigencias que las nuevas realidades imponen. Asimismo, las sociedades deben generar profundas transformaciones que garanticen que hombres y mujeres de todos los orígenes y edades tengan acceso a las mismas condiciones laborales y las mismas oportunidades.
Esta investigación, basada en el análisis de encuestas de hogares y estudios especiales sobre educación, empleo, uso del tiempo y población, pretende llamar la atención sobre los desafíos que aún persisten y que están relacionados con las desigualdades socioeconómicas, étnicas y de género, y con la calidad de la educación.