Descripción
Un fenómeno demográfico destacable de fines del siglo XX, y que probablemente se extenderá al siguiente, es el envejecimiento de la población, que es resultado de un descenso sostenido en los niveles de fecundidad y de un aumento en la esperanza de vida. Este proceso es visible en las estructuras etarias de una población, donde la cantidad relativa de personas de edad aumenta gradualmente y la de niños tiende a disminuir. En los países desarrollados el envejecimiento está consolidado y seguirá su curso al menos a mediano plazo; los países en vías de desarrollo presentan situaciones heterogéneas, aunque todos, en mayor o en menor medida, ya van hacia el envejecimiento. Los países de América Latina y El Caribe más avanzados en la transición demográfica (con bajas tasas de natalidad y mortalidad); muestran estructuras envejecidas y en el resto de los países este proceso ya comenzó, con la particularidad de que el envejecimiento ocurrirá en un lapso de tiempo mucho menor que en los países desarrollados; así lo señalan las proyecciones vigentes (Naciones Unidas, 1999);. Esos cambios plantean nuevos desafíos a la sociedad, pues van acompañados de profundas modificaciones en las estructuras sociales, económicas y culturales. El envejecimiento ha sido reconocido en diversos foros nacionales e internacionales y su primer antecedente es la Asamblea Mundial sobre el Envejecimiento (Viena, 1982);, cuyo Plan de Acción fue refrendado por la Asamblea General de las Naciones Unidas en ese mismo año. En la Asamblea General de 1991 se aprobaron los Principios de las Naciones Unidas en favor de las personas de edad y en el Programa de Acción de la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo (El Cairo, 1994); se reafirma la valoración del envejecimiento así como la necesidad de fijar objetivos y medidas para favorecer la calidad de vida del adulto mayor.
En la región, la CEPAL adoptó en 1996 un Plan de Acción Regional Latinoamericano y del Caribe sobre Población y Desarrollo que incluye el tema. En 1999 (Año Internacional de las Personas de Edad); se realizó en Santiago de Chile un Encuentro Latinoamericano y Caribeño sobre las Personas de Edad, que amplió el conocimiento del proceso de envejecimiento y sus repercusiones sociales y económicas, y aportó elementos para el diseño y puesta en práctica de políticas tendientes a mejorar las condiciones de vida del adulto mayor.
El objetivo de este trabajo es conducir una descripción comparativa de algunos aspectos de las condiciones de vida de los adultos mayores de los países de la región y entregar un panorama del proceso de envejecimiento y de la situación socioeconómica de las personas de edad. En la medida en que se disponga de antecedentes acerca de quiénes son y cómo viven actualmente los adultos mayores, será más fácil la implementación de programas pertinentes y oportunos.