Descripción
Considerando únicamente los gastos que, en función de la información disponible, han podido ser clasificados claramente como medioambientales, tanto para el
sector público nacional como provincial, se ha estimado que el gasto
público efectivamente ejecutado en dicha área llegó,
en Argentina, a los US$ 440 millones en 2000 (US$ 12 per cápita);,
lo cual equivale al 0,6% del gasto público total de ambos niveles
de gobierno y al 0,15% del PIB doméstico (cuadro A);.
En cuanto a la evolución de dicho gasto a lo largo del período
1994-2000, se observan oscilaciones significativas en los montos erogados,
que van desde un mínimo de US$ 303 millones en 1997 a un máximo
de US$ 532 millones en 1999 (en términos del gasto total Nación-provincias
el aumento es de 0,4 a 0,8% entre ambos años);, para luego descender
a los valores mencionados en el párrafo anterior.
Sumando también las estimaciones de gasto municipal, para las cuales
sólo se cuenta con datos ciertos hasta 1997 (lo cual obliga a hacer
una extrapolación para tener un estimado para el 2000);, tendríamos
que en 2000 el gasto público en medio ambiente del conjunto del sector
público argentino llegó a US$ 1 430 millones.
Considerando los problemas existentes en materia de disponibilidad de información,
estas estimaciones son, seguramente, "de mínima".
No hay estimaciones respecto del gasto privado en medio ambiente en Argentina.
La única fuente de datos disponible es el Consejo Empresario Argentino
para el Desarrollo Sustentable (CEADS);, que reúne a 38 grupos empresarios
que representan, en su conjunto, alrededor de un 25% de las ventas de las
1 000 mayores empresas argentinas. Extrapolando, bajo ciertos supuestos,
las erogaciones declaradas de dichas firmas, tendríamos que en 2000
el gasto privado en medio ambiente en la Argentina habría llegado
a US$ 480 millones.
En base a los datos recién expuestos, surge que en la Argentina se
estaría gastando, al presente, en torno al 0,67% del PIB en medio
ambiente (algo más de US$ 1 900 millones anuales o poco más
de US$ 50 per cápita);, y que el grueso de ese gasto se realizaría
en el ámbito municipal (especialmente concentrado en recolección
de residuos);, seguido de las provincias, siendo marginal la participación
del gobierno nacional y creciente la del sector privado (que en 2000 podría
haber aportado alrededor de un cuarto del gasto total);.
Si bien estos datos deben ser tomados con cautela, dado
el carácter "precario" de algunas de las estimaciones
presentadas, un análisis de la serie del gasto ambiental total
en la Argentina exhibe valores estancados entre 1994 y 1997 (en torno
a los US$ 1 400 millones);, que luego trepan a más de US$ 1 600
millones en 1998 y más de US$ 1 900 millones en 1999 y 2000. Así,
el gasto ambiental pasó de 0,5 a casi 0,7% del PIB entre 1997 y
2000.
En la comparación internacional, si bien previsiblemente
el gasto en la Argentina es inferior al promedio para los países
desarrollados, lo que destina el sector público a la finalidad
medio ambiente con relación al PIB no es sensiblemente distinto
de lo que asignan varios países europeos, e incluso no está
demasiado atrás de lo gastado por Estados Unidos o Canadá.
En cuanto a la clasificación del gasto ambiental
por finalidad, la misma sólo se ha podido hacer para el nivel nacional.
Allí, algo más del 23% de las erogaciones corresponden a
la gestión de desechos líquidos y la protección de
áreas naturales y seminaturales. En tanto, las actividades de investigación
y desarrollo se llevan alrededor de 13% del gasto y la protección
y recuperación de suelos y aguas un 12,5%. Sin embargo, cabe recordar
que, como se dijo antes, el grueso del gasto público se hace a
nivel provincial y municipal, el cual no ha podido ser clasificado. Sin
embargo, cabe citar que alrededor de US$ 800-900 millones anuales son
dedicados a recolección de residuos en los municipios, cifra ampliamente
superior a los US$ 140 millones sobre los cuales se hizo la clasificación
de gastos recién comentada.
También sobre la base solamente del gasto ambiental realizado a
nivel nacional, se observa que:
i); Tres áreas de gobierno concentran el gasto en
la materia al presente: Parques Nacionales (41% en el año 2000);,
el Ministerio de Desarrollo Social y Medio Ambiente (35%); y el Ministerio
de Infraestructura y Vivienda (23%);.
ii); Los gastos de inversión son una proporción baja del
gasto total (14% promedio en 1994-2001);.
iii);El Tesoro Nacional financia el grueso de los gastos, mientras que
la incidencia del financiamiento externo (principalmente consistente en
créditos); alcanza, en promedio anual, un 14%, aunque con una tendencia
al crecimiento de su participación relativa -truncada sólo
en el año 2000- a lo largo del período bajo análisis
(cuadro B);.
En relación con la distribución regional
de los fondos destinados a medio ambiente, en el caso de los de origen
nacional se ejecutan mayormente en la ciudad de Buenos Aires -lo
cual obedece a la concentración en dicha urbe de las funciones
burocráticas y administrativas del área-, salvo en
lo que hace a Parques Naturales, donde obviamente la ejecución
se hace en las provincias en donde aquellos se ubican. En cuanto a los
gastos de origen provincial y municipal, dadas las diferencias de criterio
que pueden existir en cuanto a la clasificación de las erogaciones,
es difícil establecer comparaciones fundadas en base a la información
disponible.
En cuanto a los instrumentos económicos para la
gestión ambiental, el único existente es la tasa anual que
se cobra a los generadores y operadores de residuos peligrosos en función
de la Ley No. 24 051 de Residuos Peligrosos, promulgada en 1992. En el
primer semestre de 2001 ingresaron poco menos de US$ 440 mil por el cobro
de la mencionada tasa. A su vez, varias provincias cuentan con registros
propios -e incluso algunas tienen normativas específicas-
y recaudan sus propias tasas por este mismo concepto.
Obviamente, a futuro surge un conjunto de tareas que serían
necesarias para mejorar la calidad y precisión de la información
sobre el gasto en edio ambiente, tanto en la esfera pública -en
los distintos niveles de gobierno- como privada. En este sentido,
las estimaciones aquí presentadas son un primer paso en dirección
a cuantificar dicho gasto.
Finalmente, debe señalarse que no existen datos
en la Argentina que permitan evaluar la eficiencia o eficacia del gasto
en medio ambiente, deficiencia que es también común a otras
areas del gasto público en el país. Sin duda, el desarrollo
y aplicación de indicadores y metodologías para realizar
tal evaluación sería de gran utilidad, incluyendo la producción
de datos ciertos respecto de los niveles de contaminación ambiental
a nivel nacional, provincial y municipal, incluyendo también a
las firmas privadas.
Cuadro
A
GASTO AMBIENTAL DEL SECTOR PÚBLICO NACIONAL Y PROVINCIAL
EN ARGENTINA
Año
$
millones corriente
$
millones constantes (a);
%
variación anual (b);
Gaste
ambiental per cápita (4); (b);
%
del gasto público Nación-provincias
%
del PIB
1994
371
371
n.c
11
0,6
0,14
1995
392
404
9
12
0,6
0,15
1996
310
319
-21
9
0,5
0,11
1997
303
311
-3
9
0,4
0,10
1998
393
396
27
11
0,6
0,13
1999
523
517
31
14
0,8
0,18
2000
439
439
-15
12
0,6
0,15
Fuente: Elaboración
propia en base a datos de la Dirección de Gastos Sociales Consolidados,
Ministerio de Economía de la República Argentina.
(a);: deflactado en función del índice
de precios implícitos del PIB.
(b);: calculado sobre la base de valores constantes.
Cuadro
B
GASTO AMBIENTAL DEL SECTOR PÚBLICO NACIONAL
POR FUENTE DE FINANCIAMIENTO, 1995-2001
(Miles de dólares y porcentajes);
1995
%
1996
%
1997
%
1998
%
1999
%
2000
%
2001
%
Total
%
Financ.
Interno
48.050,9
94
53.643,0
90
51.551,2
87
61.432,7
85
48.879,7
83
39.966,9
91
51.876,8
78
355.401,2
86
Financ.
Externo
2.898,9
6
6.127,3
10
7.710,1
13
10.644,9
15
9.846,5
17
4.024,4
9
14.603,0
22
55.855,0
14
Total
50,949.8
100
59,770.4
100
59,261.3
100
72,077.6
100
58,726.1
100
43,991.3
100
66,479.8
100
411,256.2
100
Fuente: Elaboración
propia en base a datos de la Dirección de Gastos Sociales Consolidados,
Ministerio de Economía de la República Argentina.