Descripción
En 2005, la inversión extranjera directa que ingresó a América Latina y el Caribe --excluidos los centros financieros-- superó los 68.000 millones de dólares, cifra casi un 11% mayor que la del año anterior. Pese a que estos ingresos son muy superiores a los que se registraron entre 2001 y 2003, aún distan de los del período de auge de la inversión extranjera directa, a fines de la década pasada. Además, la región sigue perdiendo participación en los flujos mundiales, lo que indicaría que todavía no ha alcanzado su verdadero potencial para atraer tales inversiones. Este problema tiene por lo menos dos dimensiones.
Por una parte, frente a la fuerte competencia para atraer IED, la región demuestra ciertas debilidades en lo referente a las políticas y la institucionalidad relacionadas con este tema. A los efectos de comprender mejor este punto, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) realizó un estudio de l5 organismos de promoción de inversiones, para analizar su papel y sus prácticas. En el capítulo II se presentan los resultados de este estudio.
Por otra parte, la posibilidad de aprovechar la IED y la presencia de las empresas transnacionales depende, en gran medida, de la capacidad de absorción de las empresas nacionales. En la segunda parte del informe de este año se examina en detalle la situación competitiva y el proceso de internacionalización de un importante grupo de empresas transnacionales emergentes de América Latina, aquí denominadas "translatinas". Para ello se realizaron entrevistas a ejecutivos de las principales translatinas de Argentina, Brasil, Chile y México. En los capítulos III a VI se presentan las conclusiones de este análisis.