Nota informativa
CEPAL participa en la semana Internacional de la Economía XII Edición – La Economía de los Recursos Naturales
En primera instancia, participó la Dra. Jeannette Sánchez, Directora de la División de Recursos Naturales, quien expuso sobre el rol de los recursos naturales en el desarrollo sostenible en América Latina y el Caribe. Al respecto, destacó hitos importantes de las dos últimas décadas como el menor crecimiento del PIB, mayores tasas de interés, variabilidad cambiaria y fluctuación de los precios, que han afectado a los países de América Latina y el Caribe. De igual manera, identificó aspectos como la baja inversión, y el retroceso en más de dos décadas de los niveles de pobreza extrema, como parte de los problemas estructurales de la región. En ese contexto, la Dra. Sánchez resaltó la amplia diversidad de recursos naturales (renovables y no renovables) con los que cuenta la región y que pueden aportar al desarrollo sostenible e inclusivo de nuestros países, siempre que sean adecuadamente gestionados. Por otra parte, la dependencia de los recuros naturales aumentó, así como la exportación de biomasa y minerales. Si bien el boom exportador de recursos primarios y de precios contribuyó a la reducción de la pobreza a inicios del siglo, la región registra una alta conflictividad socioambiental, especialmente en sectores como la minería, agua, bosques y combustibles fósiles; así como un retroceso en indicadores sociales.
En vista de lo anterior, existen varios desafíos estructurales por resolver: 1) superar la pobreza y la desigualdad; 2) enfrentar la restricción externa; 3) Enfrentar la insostenibilidad ambiental, para lo cual, desde CEPAL se propone: a) un nuevo estilo de desarrollo que aproveche el conocimiento, tecnología y capital social para incentivar el desarrollo sostenible; b) un cambio estructural con igualdad a través de una estrategia denominada el Gran Impulso a la Sostenibilidad, tomando en cuenta aspectos como la transición energética, electromovilidad, industria digital, bioeconomía, entre otros; c) considerar los recursos naturales como una oportunidad, para lo cual se debe incentivar la especialización primaria exportadora, desarrollar tejidos económicos y cadenas de valor más complejas, inclusivas y dinámicas. nivelen el ámbito nacional se debe impulsar una gobernanza de los recursos naturales y servicios asociados mediante una estrategia integral de desarrollo sostenible, que permita alcanzar una transición socio ecológica justa. A nivel macro y sectorial se debe incentivar la diversificación económica y agregación de valor, siendo importante la construcción de políticas públicas y otros mecanismos que contribuyan a la reducción de la vulnerabilidad de shocks internos y la generación de conocimientos para aumentar la eficiencia en el uso de los recursos naturales.
A continuación, se presentó la charla magistral relacionada con temas hídricos, la cual estuvo a cargo de la Dra. Silvia Saravia Matus, Oficial de Asuntos Económicos de la Unidad de Agua y Energía. La Dra. Saravia Matus presentó el panorama de los recursos hídricos en América Latina y el Caribe, y la propuesta cepalina de una transición hídrica sostenible. En primer lugar, la doctora expuso sobre la situación de la disponibilidad de agua, los escenarios de escasez hídrica que se han visto magnificados por el impacto del cambio climático, y los desafíos regionales relacionados a la dispersión institucional y territorial de la gobernanza hídrica, lo que dificulta una coordinación efectiva, y también la ineficiencia regional en el tratamiento de aguas residuales y las tendencias de acople entre extracción de agua y el PIB. Asimismo, Saravia Matus presentó los diferentes modelos de gestión en el sector de agua potable y saneamiento, así como estrategias para movilizar la inversión pública y privada remarcando las diferencias entre modelos de prestación de áreas urbanas y rurales. Adicionalmente, Saravia Matus resaltó la urgencia de cerrar las brechas de infraestructura para atender a al menos 17 millones de personas en la región sin servicio básico de agua potable, y 72 millones de personas sin servicio básico de saneamiento.
En la segunda parte de la ponencia, la Dra. Saravia Matus expuso la propuesta de CEPAL de una transición hídrica sostenible e inclusiva que se basa en cuatro pilares de acción que a la vez generan sustanciales beneficios tanto económicos, como sociales y ambientales; 1) Universalizar el acceso al agua potable y saneamiento gestionado de manera segura, sin dejar a nadie atrás, 2) Asegurar mayor equidad en la asequibilidad del servicio, 3) Reducir las externalidades negativas relacionadas a la contaminación, sobreexplotación y conflictos y 4) transformar el actual manejo lineal del agua en una gestión hídrica circular. Luego, detalló los beneficios de impulsar la transición, utilizando el marco de aceleración global del ODS 6, el cual se basa en cinco pilares; financiamiento, datos e información, desarrollo de capacidades, innovación y gobernanza. Un mensaje central es que la movilización de 1,3% del PIB regional durante los próximos 10 años permitiría la creación de 3,6 millones de empleos cada año.
Por último, la Dra. Saravia Matus concluyó que la gestión del agua debe responder al interés público, priorizando el consumo humano y la conservación de los servicios ecosistémicos, seguido de las actividades de subsistencia y otras actividades productivas. Expuso la importancia de las señales de precios de extracción y las multas ante impactos negativos en el ambiente para que estos reflejen todos los costos y sean sensibles a la disponibildiad hídrica y sus variaciones. Además destacó la importancia de contar con sistemas de fiscalización y monitoreo de las cuencas y sus caudales para promover un mayor sentido de responsabilidad en el uso. Para cerrar, la Dra. Saravia Matus invitó a la audiencia a participar en los Diálogos del agua 2023, una actividad preparatoria regional de cara a la Conferencia del Agua de Naciones Unidas 2023.
En un tercer espacio, la Dra. Marina Gil Sevilla, Asistente Senior de Asuntos Económicos de la Unidad de Agua y Energía, presentó el diagnóstico del sector energético para ALC, incluyendo información relevante sobre pobreza energética, para después introducir lapropuesta de transición energética sostenible e inclusiva para la región. Se hizo énfasis en la conformación de la matriz energética regional, dominada por los combustibles fósiles, aspecto que contribuye en gran medida al calentamiento global a través de la emisión de gases de efecto invernadero y contaminantes. Enfatizó la oportunidad que presnta el sector transporte por ser el principal consumidor energético final, seguido del sector industrial y el residencial. Resaltó que los combustibles fósiles generan alrededor del 60% de la electricidad, aspecto que podría ser optimizado con inversiones en energías renovables con un alto impacto en la reducción de emisiones de CO2, provenientes del sector transporte principalmente. Al respecto, también señaló que, si bien ALC es una de las regiones con mayor proporción de energías renovables modernas en el consumo final de energía, esto gracias a la generación hidroeléctrica, consumo de bioenergía en procesos industriales y el uso de biocombustibles en el transporte, así como otras fuentes importantes como la solar y eólica, aún no han logrado superar en participación a las fuentes fósiles, por lo que todavía se debe trabajar en políticas públicas que incentiven la generación de energía a través de fuentes renovables.
En relación a la pobreza energética, la Dra. Gil enfatizó que es necesario y urgente facilitar el acceso a la energía con equidad, calidad y para satisfacer las necesidades básicas del territorio, siendo estos aspectos fundamentales para sostener el desarrollo humano y económico de la región. Para lograrlo, se señaló que es importante contar con servicios energéticos estables, tecnologías eficientes, precios justos y otros mecanismos que garanticen el acceso a electricidad y sistemas de cocción limpios, entre otros.
Por otra parte, se presentó la propuesta de CEPAL de transición energética para la región, entendida, no solo como el reemplazo progresivo del uso de energía fósil y nuclear por fuentes energéticas renovables, sino como un proceso en el que se deben fortalecer las políticas publicas, las instituciones y la gobernanza. Para operacionalizar lo anterior, se presentó la propuesta cepalina conformada por cinco pilares que son: i) Incrementar la Energía renovable en la matriz; ii) Universalizar el acceso a la electricidad basada en renovables y disminuir la pobreza energética; iii) Incrementar la eficiencia de los sistemas energéticos v). Aumentar seguridad y resiliencia energética regional ante choques externos: iv) Fortalecer la complementariedad, integración e interconexión entre los sistemas energéticos de la región y, v) Aumentar seguridad y resiliencia energética regional ante choques externos.
Finalmente, se destacaron las políticas públicas para acelerar la transición energética, la cual debe contemplar la nueva industria de renovables así como otras industrias emergentes y que pueden contribuir a la transición energética sin dejar a nadie atrás 1) Impulso inversor, 2) Universalización de la electrificación con base en renovables, 3) impulso a la demanda de renovables, 4) Incremento de la eficiencia energética, 5) cadenas de valor, 6) financiamiento, 7) gobernanza, participación y cooperación público-privada y, 8) planificación de largo plazo e integración energética regional.