23 de octubre 2024. En el marco del Compromiso de Buenos Aires de 2022, la CEPAL y los estados miembros reafirmaron su compromiso de impulsar la transversalización de la perspectiva de género en los sistemas estadísticos nacionales, considerando una perspectiva interseccional, intercultural y territorial. En Chile, este esfuerzo se refleja en el décimo aniversario de la Subcomisión de Estadísticas de Género (SEG), una plataforma clave para fortalecer un sistema estadístico inclusivo y representativo de las diversas realidades de género.
Durante el evento de celebración del décimo aniversario de la Subcomisión, cuya secretaría técnica se encuentra a cargo del Instituto Nacional de Estadística y el Ministerio de la Mujer y le Equidad de Género de Chile, Karen García, Estadística de la División de Asuntos de Género (DAG) de la CEPAL, enfatizó la importancia de los estándares estadísticos regionales - como la Clasificación de Actividades de Uso de Tiempo para América Latina y el Caribe (CAUTAL) y la Guía para la transversalización de la perspectiva de género en la producción estadística - para fortalecer la capacidad de los estados en el monitoreo de la igualdad de género. Subrayó que espacios como la Conferencia Estadística de las Américas y la Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe han sido cruciales para promover los aportes de los países en la generación de estos estándares que favorecen la comparabilidad y confiabilidad de las mediciones de género en la región, permitiendo que los datos desagregados faciliten el análisis de las brechas y desafíos en diversos ámbitos.
La profesional de Naciones Unidas destacó el rol de la CEPAL en la elaboración de metodologías y en la construcción de marcos temáticos, como los que se encuentran en la Estrategia de Montevideo (2016), que guían el trabajo en áreas clave en las distintas dimensiones de la autonomía de las mujeres, incluyendo el uso del tiempo, el trabajo no remunerado y la participación política de las mujeres y las violencias basadas en género contra las mujeres. Asimismo, señaló la importancia de seguir fortaleciendo entornos habilitadores como la SEG, que permitan la incorporación de la perspectiva de género en toda la estructura de gobernanza de los sistemas nacionales de estadística, lo que permite la coordinación de productores y usuarios de estadísticas para informar el diseño de las políticas públicas para la igualdad y monitorear su implementación. Resaltó la importancia de este espacio en la divulgación de datos de manera coordinada y periódica, y su potencial para abordar desafíos como la integración de diversas fuentes de datos estadísticos que permitan avanzar hacia la sociedad del cuidado.
Por su parte, la Ministra de la Mujer y la Equidad de Género de Chile, Antonia Orellana, y el director del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), Ricardo Vicuña, coincidieron en la relevancia de contar con un sistema de estadísticas de género sólido para nutrir la política pública y monitorear los compromisos internacionales. La Ministra destacó el papel de la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW) en fortalecer la institucionalidad de estas estadísticas, mientras que Vicuña recordó que la SEG inició con la participación de siete instituciones y actualmente incluye más de 30, lo que ha permitido una mejor coordinación en la producción de estadísticas inclusivas y el desarrollo de herramientas para visibilizar desigualdades en el país.
La CEPAL ha reafirmado su compromiso en el acompañamiento técnico y metodológico de estos avances, promoviendo la transformación de los datos en información, la información en conocimiento y el conocimiento en decisión política. El esfuerzo de la SEG ha facilitado la consolidación de más de 80 indicadores en áreas como trabajo, salud, educación, violencia de género y representación política, alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible. A lo largo de los años, la SEG ha avanzado en el fortalecimiento del sistema de indicadores y la inclusión de actores clave para la autonomía económica en el país, contribuyendo a visibilizar y abordar las desigualdades de género desde una perspectiva robusta e inclusiva.
