Descripción
Resumen
Este trabajo, basado en gran medida en el informe de Bezanson
et al. (2000);, ofrece una perspectiva de conjunto acerca del papel que
juega la Banca Multilateral de Desarrollo (BMD); en América Latina y
plantea algunos temas de discusión sobre sus perspectivas futuras. La
banca multilateral es una de las principales innovaciones asociadas a
lo que se puede llamar el "experimento de cooperación para el
desarrollo" que se puso en práctica durante el último medio siglo,
luego de la Segunda Guerra Mundial (Sagasti y Alcalde, 1999);.
Como toda innovación institucional, la banca multilateral de
desarrollo fue evolucionando a lo largo del tiempo de tal manera que
su concepción inicial, centrada principalmente en otorgar garantías
para préstamos e inversiones del sector privado, se transformó
progresivamente hasta abarcar un conjunto de funciones mucho más
amplias que han tenido un impacto significativo en el desempeño
económico y social de los países en desarrollo.
Sin embargo, pese a su papel central en los procesos de
desarrollo en todas las regiones del mundo, durante el último decenio
la banca multilateral ha sido sometida a fuertes críticas, tanto de
sectores radicales que la consideran un agente de la destrucción del
medio ambiente y de formas tradicionales de vida, como de sectores
conservadores que arguyen que usurpa el espacio de acción que le
corresponde al sector privado. Por ejemplo, la campaña "50 años son
suficiente" organizada a mediados del decenio de los noventa por una
coalición de organizaciones no gubernamentales planteó una
reestructuración radical del Banco Mundial y, por extensión, de los
demás bancos multilaterales de desarrollo (BMD);.
Al otro extremo, el informe de la Comisión Meltzer sugirió convertir las operaciones de préstamo a los países pobres del Banco Mundial en donaciones, eliminar sus préstamos a los países de medianos ingresos y los países emergentes, y trasladar algunas de sus funciones a los bancos
regionales, lo que en la práctica significa desmantelar esta institución (véase: anexo 1; US Network for Global… (web);, y Meltzer, 2000);.
América Latina ha tenido una relación especial con la banca multilateral de desarrollo. La presencia del Banco Mundial ha sido muy activa durante el último medio siglo en todos los países de América Latina; en la región se estableció el primero de los bancos regionales, se crearon los primeros bancos subregionales, y América Latina cuenta con más BMD que cualquier otra región del mundo. Estas instituciones han ayudado a subsanar el déficit estructural de ahorro interno de los países de América Latina, sea ya mediante el financiamiento directo de proyectos y programas,
o a través de la movilización de otras fuentes de financiamiento públicas y privadas. Además, el comportamiento "anticíclico" de los flujos asociados a la banca multilateral de desarrollo ha permitido amortiguar el impacto de la desaceleración de los flujos privados en más de una ocasión
a lo largo del último medio siglo.
Luego de una breve caracterización de la banca multilateral y de una somera apreciación de su evolución en la región, este trabajo resume el papel que esta institución juega en el financiamiento externo de América Latina, analiza sus principales funciones y luego examina algunos aspectos de sus operaciones y sus perspectivas futuras.