Descripción
En 2014, la riqueza total de México ascendió a 76,7 billones de pesos. El 37% de ella estaba en manos de los hogares; el gobierno administraba el 23%, las empresas privadas el 19%, las empresas públicas el 9%, el resto del mundo poseía el 7% y las instituciones financieras el 5%. En promedio cada hogar tendría, si hubiera una distribución equitativa, 900.000 pesos en activos físicos y financieros, monto que sería más que suficiente para que las personas tuvieran una vida holgada. Lamentablemente la repartición es muy desigual. Dos terceras partes de la riqueza están en manos del 10% más rico del país y el 1% de los muy ricos acaparan más de un tercio. Por ello, el coeficiente de Gini de la riqueza es de 0,791.
La distribución es todavía más desigual en los activos financieros: el 80% es propiedad del 10% más rico.