Descripción
La edición 2008-2009 del Panorama de la inserción internacional de América Latina y el Caribe se divide en tres capítulos. En el capítulo I se analiza la coyuntura económica internacional con una mirada de mediano plazo. Se presta especial atención a las variables que más pueden modificar el escenario global y afectar la inserción internacional de las economías de América Latina y el Caribe. Como ejemplo de los cambios que está generando o acentuando la crisis cabe destacar la creciente importancia de las economías emergentes, con el consiguiente impacto sobre las corrientes comerciales de la región, y las dinámicas diferenciadas que las manufacturas, las materias primas y los servicios presentan frente a la crisis en el comercio mundial. Además, se examinan los debates internacionales en curso sobre cambio climático y comercio, así como las distintas manifestaciones proteccionistas que han surgido a raíz de la crisis. En el capítulo II se revisa la evolución del comercio regional durante la actual crisis, tanto desde una perspectiva a largo plazo, como en un horizonte más coyuntural. El análisis considera la evolución de las corrientes comerciales según orígenes y destinos, así como su composición sectorial. También se examina el comportamiento de los precios de las materias primas, la evolución de los términos de intercambio, los flujos de servicios, el turismo, la inversión extranjera directa (IED) y las remesas de los migrantes. Por último, se pasa revista a las reacciones de la política comercial frente a la crisis que han tenido lugar en la región. En el capítulo III se examinan los espacios de cooperación regional en América Latina y el Caribe. Se señala que el nuevo contexto internacional exige una mayor cooperación entre los países de la región, no solo por la necesidad de limitar los efectos de la actual crisis, sino también por la urgencia de mejorar su inserción en la economía mundial. Con este fin, se propone privilegiar siete áreas de trabajo: infraestructura, apoyo al comercio, innovaCión, reducción de las asimetrías, cohesión social, cambio climático y acercamiento a la región de Asia y el Pacífico. Todas ellas son elementos determinantes de la competitividad, la innovación y la productividad de la región a mediano y largo plazo. En este sentido, se argumenta que las consecuencias de perder la carrera de la competitividad global serían mucho más graves que los efectos de la crisis actual, puesto que por duros que sean, estos últimos serán transitorios. Por el contrario, los rezagos en competitividad, innovación y productividad constituyen un obstáculo permanente para avanzar en la estrategia de crecimiento con equidad.