Nota informativa
En la primera parte de la capacitación, la Natalia Sarmanto, Experta en Recursos Hídricos de CEPAL, contextualizó la evolución de los mecanismos hídricos internacionales desde 1977 hasta 2009. Entre los eventos destacados se incluyeron la Conferencia del Agua de 1977, el Decenio Internacional del Agua Potable y del Saneamiento Ambiental (1981-1990), y la Cumbre de la Tierra de 1992. Asimismo, se abordaron los Objetivos de Desarrollo del Milenio (2000) y el Decenio Internacional para la Acción “El Agua Fuente de Vida” (2005-2015), enfatizando su rol fundamental en la construcción de políticas y objetivos en torno al acceso a agua potable y saneamiento.
Posteriormente, Lisbeth Naranjo, Experta en Recursos Hídricos de CEPAL, detalló los procesos internacionales recientes que han dado continuidad a estos esfuerzos, entre ellos el reconocimiento del Derecho Humano al Agua y Saneamiento en 2010, la Agenda 2030 con el ODS 6, y el Decenio Internacional para la Acción “Agua para el Desarrollo Sostenible” (2018-2028). Los participantes discutieron también la Agenda de Acción por el Agua 2023 y los nuevos eventos proyectados, como la Cumbre Social Mundial 2025 y la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Agua 2026, junto a los eventos recurrentes como el Día Mundial del Agua.
La actividad interactiva durante la capacitación permitió a los participantes elegir los mecanismos que consideran más efectivos en el contexto de la República Dominicana, y ordenaron los aceleradores del ODS 6 en función de su relevancia para el país. Esto brindó una visión general sobre las prioridades locales y los enfoques necesarios para acelerar el acceso a agua potable y saneamiento.
En el ámbito regional, Alba Llavona, Experta en Recursos Hídricos de CEPAL, presentó mecanismos de cooperación en América Latina y el Caribe, incluyendo los Diálogos Regionales del Agua de CEPAL, el Proceso Regional de las Américas BID/CEPAL, y la Conferencia de Direcciones y Autoridades Iberoamericanas del Agua (CODIA). También se abordaron las actividades de la Asociación de Agua y Aguas Residuales del Caribe (CWWA) y la Carta Ambiental Andina, las cuales ofrecen una plataforma de colaboración para abordar los desafíos comunes de la región.
La sesión concluyó con un taller de co-creación, donde los participantes compartieron experiencias sobre la participación de la República Dominicana en estos mecanismos y el impacto de dichas intervenciones. La receptividad y el compromiso de los asistentes fueron notables, generando una discusión enriquecedora que reafirmó la importancia de estos espacios de colaboración para la construcción de estrategias sostenibles en la gestión del agua.