Description
Resumen En este trabajo se identifican y describen los determinantes demográficos directos de la distribución espacial de la población (DEP). La evolución de estos determinantes se examina con un marco de referencia que interrelaciona los siguientes componentes: i) atractivos económicos, sociales, culturales y políticos de los ámbitos geográficos; ii) procesos de desestructuración social o crisis socioeconómicas, localizados geográficamente; iii) habitabilidad de los ecosistemas; iv) conectividad de las localidades; v) historia de las regiones y de las ciudades; vi) políticas públicas que afectan directa o indirectamente los patrones de localización de la población en el territorio y, vii) marco socioeconómico y cultural en que operan los actores. La mayor parte de estos componentes influye sobre los intercambios migratorios, aunque algunos de ellos también afectan a la fecundidad y la mortalidad y, por esa vía, al crecimiento vegetativo diferencial entre ámbitos geográficos. Luego se revisan los principales rasgos de la DEP latinoamericana: i) intensa ocupación de la costa o de zonas cercanas al litoral, con una persistente gravitación de zonas interiores de ocupación histórica y una rápida expansión hacia los tradicionales espacios vacíos en el corazón (Amazonas y Orinoco) de la región; ii) polarización entre Divisiones Administrativas Mayores (DAM) dinámicas ¾metropolitanas, de colonización y fronterizas¾ y aletargadas ¾tradicionales, pobres y densas¾ iii) rápida urbanización, porcentaje urbano descollante entre las regiones en desarrollo y alta figuración de las metrópolis y grandes aglomerados urbanos. A ellos se agregan: iv) ampliación de la trama urbana por el dinamismo relativo de ciudades intermedias; v) remodelación de las ciudades, con un paulatino despoblamiento de las zonas centrales, progresiva ocupación de la periferia ¾normalmente por población pobre, pero también, aunque con modos específicos de asentamiento, de población de altos ingresos¾, indicios de policentrismo, intensificación de la segregación residencial y ampliación del área de influencia de las zonas metropolitanas, que se convierten en extensiones vinculadas funcionalmente y conectadas físicamente; vi) señales de una nueva ruralidad en materia productiva y hasta social, aunque sin signos de un aumento en la capacidad de retención de población rural; vii) transformación radical del panorama migratorio por: a) declinación sistemática e irreversible de los traslados del campo a la ciudad; b) consolidación de la migración entre ciudades como el principal flujo interno; c) emergencia de la migración intrametropolitana como asunto relevante en términos cuantitativos y cualitativos; d) persistencia de la migración itinerante en zonas rurales; e) creciente relevancia de la ambigüedad o alternancia cotidiana entre condición urbana y rural y de fenómenos como las denominadas zonas rururbanas asociadas a la suburbanización de grupos de altos ingresos; f) diversificación de los flujos entre ciudades en función de coyunturas y políticas públicas. El documento concluye con un conjunto de orientaciones respecto de las tendencias previsibles en materia de DEP, tanto por las proyecciones demográficas como por las perspectivas de los determinantes en última instancia y se relevan las consecuencias probables de tales tendencias, así como las opciones de políticas para influir sobre ellas.""