Descripción
Resumen El artículo usa el análisis de las cadenas globales de productos básicos (Global Commodity Chains) para explicar los cambios en la producción, estrategias comerciales y corporativas que transformaron la industria mundial del vestido en las últimas décadas y crearon nuevas condiciones para la modernización de la industria. La industria del vestido se identifica como una cadena dirigida por intermediarios comerciales que tiene tres tipos de empresas principales: minoristas, comercializadores de marca y fabricantes de marcas. Como la producción de vestimenta se ha dispersado mundialmente y la competencia entre estas empresas se ha intensificado, cada tipo de empresa líder ha desarrollado nuevas redes internacionales para abastecerse. Mientras se están desverticalizando de la producción, están fortaleciendo sus actividades en el alto valor agregado del diseño y segmentos del mercado de la cadena de vestimenta, llevando a un confuso estado los limites entre estas empresas y al realineamiento de intereses dentro de la cadena. La modernización en la industria mundial del vestido esta primeramente asociada con una transición de ensamblaje al paquete completo. Comparada con la mera ensamblada de insumos importados, la producción de paquete completo cambia fundamentalmente la relación entre el comprador y el proveedor en una dirección que da mucho mas autonomía y potencial de aprendizaje para la empresa proveedora. La producción de paquete completo es necesaria debido a que los minoristas y comercializadores de marca que demandan la vestimenta no saben confeccionarla. Lugares particulares como las nuevas economías industrializadas de Asia del Este como Hong Kong, Taiwan, Corea del Sur, y la República de China, han usado el paquete completo para crear una ventaja duradera para sus exportaciones de prendas de vestir. No obstante, el Acuerdo de Libre Comercio entre los Estados Unidos, Canadá y México, introduce condiciones favorables para la extensión de la producción de paquete completo en Norte América, y ha resultado en una relativa declinación en las exportaciones de vestimenta de Asia del Este a los Estados Unidos. El artículo propone la distinción entre tres nuevos modelos de competencia en el mercado de Norte América: El de Asia del Este, México y la Cuenca del Caribe. Cada modelo presenta diferentes perspectivas y desafíos para la modernización de la industria. Estados Unidos continua definiendo los términos de cambio y las empresas de Estados Unidos guían el proceso hacia la "customization" masiva y la entrega rápida confección. México necesita profundizar sus cadenas productivas para así competir mejor con los proveedores de Asia del Este en el mercado de paquete completo para los Estados Unidos. El modelo de la Cuenca del Caribe, casi exclusivamente limitado a ensamblado, tendrá que desarrollar cadenas productivas con los minoristas y comerciantes de marcas de Estados Unidos si quieren obtener las habilidades y los medios necesarios para entrar en actividades más diversificadas asociadas con la producción basado en el paquete completo. Debido a los cambios de poder que están ocurriendo entre las empresas textileras, de vestimenta y minoristas de Norte América, hay una pregunta clave: Quienes serán los principales "agentes organizadores" en modernizar la cadena del vestido de la región? La noción de agentes organizadores se refiere a esas empresas, extranjeras y domesticas, que podrían mejorar la competitividad del sector del vestido en México y en la Cuenca del Caribe a través de cadenas productivas con los principales fabricantes, comercializadores de marca y los minoristas. Grandes empresas en distintos segmentos de la cadena del vestido, principalmente de los Estados Unidos están compitiendo para ser los agentes coordinadores en las nuevas cadenas de Norte América que se han enfocado en reforzar las capacidades de México para realizar operaciones de paquete completo. La extensión de la paridad de NAFTA a la Cuenca del Caribe dará nuevas oportunidades a esas empresas para competir con México.""