Descripción
La entrada de inversión extranjera directa (IED) en América Latina y el Caribe registró un incremento en el 2004, primera vez que esto ocurría desde 1999. La afluencia de inversiones superó los 56.400 millones de dólares, cifra mucho mayor que los 39.100 millones que ingresaron en 2003 y que representa un aumento del 44%. Esta evolución es muy positiva para la región, dado que puede ser el comienzo de un nuevo período de auge sostenido de las inversiones, pero no significa que los países de la región hayan resuelto sus problemas relacionados con los escasos beneficios que les reporta la operación de empresas transnacionales en su territorio. Además, en términos generales las inversiones extranjeras son cualitativamente insuficientes. Por lo tanto, para que la presencia de empresas transnacionales aporte más beneficios a los países de la región estos tendrán que perfeccionar las políticas e instituciones nacionales establecidas con el fin de dar cumplimiento a los compromisos internacionales sobre inversiones, ofrecer incentivos que atraigan IED y evaluar los efectos de las políticas sobre la materia. El informe de este año se centra fundamentalmente en las estrategias de inversión motivadas por la búsqueda de mercados que aplican las empresas transnacionales en la región. El segundo capítulo está dedicado a lo ocurrido en este campo en Brasil. Este país es uno de los principales receptores de IED, en su mayor parte de esta naturaleza, y ha empezado a demostrar interés por atraer inversiones de otro tipo, sobre todo inversiones motivadas por la búsqueda de eficiencia, que se traducen en exportaciones. En el tercer capítulo se analiza lo ocurrido en el sector de electricidad en el Cono Sur. Durante el auge de las inversiones en los años noventa, este sector se caracterizó por recibir inversiones que buscan mercados, que no contribuyeron lo suficiente a ampliar la capacidad existente, lo que incidió en la crisis verificada en esta rama de actividad. En el análisis se sugiere que la adopción de medidas subregionales de desarrollo de este sector podría ayudar a atraer IED de nuevos interesados, entre otros empresas petroleras, mediante la integración de actividades en los sectores del gas y la electricidad.