Nota informativa
Para atender el desafío de preservar un bien público global como el clima es preciso realizar transformaciones estructurales profundas del actual estilo de desarrollo, que permitan transitar a un desarrollo más sostenible, en el contexto de un acuerdo internacional global, justo e incluyente, que reconozca las responsabilidades comunes pero diferenciadas.
Este es uno de los planteamientos de la publicación La economía del cambio climático en América Latina y el Caribe, una visión gráfica, elaborada en el marco del programa EUROCLIMA, financiado por la Comisión Europea, y coordinada por Alicia Bárcena, Secretaria Ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
El estudio examina las 9 tesis sobre el cambio climático en América Latina y el Caribe, así como siete desafíos del cambio climático en la región.
Entre sus planteamientos el documento señala que, pese a los avances observados a nivel internacional para hacer frente a los desafíos del cambio climático y el desarrollo sostenible, como la aprobación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), el Acuerdo de París, y la Nueva Agenda Urbana, hay una importante brecha de esfuerzo colectivo y aún es necesario avanzar en la aplicación de estos acuerdos mediante la formulación y puesta en práctica de políticas públicas específicas que permitan cambiar la trayectoria de desarrollo hacia una más sostenible con un cambio en las estructuras de producción y los patrones de consumo, consistentes con una solución al desafío del cambio climático.
Agrega que, en vista de los límites y paradojas del actual estilo de desarrollo, la CEPAL ha alentado un gran impulso ambiental que permita transformar el paradigma actual del desarrollo. Este gran impulso ambiental debe promover cambios estructurales significativos que permitan la construcción de una senda de crecimiento económico cada vez más baja en carbono en un contexto de mayor igualdad e inclusión social.
Diseñar y aplicar estas políticas públicas para el siglo XXI, que pongan en el centro y en forma simultánea al desarrollo económico, social y ambiental, en el contexto de una economía global, es uno de los grandes retos regionales, pero también una de las grandes oportunidades para hacer frente al desafío del desarrollo, señala el documento.
El informe precisa que es indispensable la construcción de acuerdos internacionales justos e incluyentes basados en el multilateralismo como única forma perdurable de preservar bienes públicos globales como el clima y de alcanzar objetivos globales como la erradicación de la pobreza. Para la conformación de estos acuerdos es necesario seguir construyendo una convergencia de intereses regionales y entre países en que la cooperación internacional sea un pilar fundamental.
La publicación fue presentada por Alicia Bárcena el miércoles 13 de diciembre de 2017 en la sede del organismo regional de las Naciones Unidas en Santiago, Chile, y comentada por los ministros Marcelo Mena, de Medio Ambiente, y Andrés Rebolledo, de Energía. Michelle Bachelet, Presidenta de la República de Chile, envió un saludo en video.