Nota informativa
Este lunes 9 de enero, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) participó de un ciclo de talleres organizado por la Corporación de Fomento a la Producción de Chile (CORFO), el que forma parte de un programa de capacitación y formación dirigido a directores y subdirectores regionales o subnacionales.
En este primero, de cinco encuentros, participó como exponente el Oficial de Asuntos Económicos de la División de Desarrollo Productivo y Empresarial de la CEPAL, Marco Dini, quien además es coordinador del proyecto de desarrollo productivo y territorial que ejecuta la CEPAL, en conjunto con la Subsecretaría de Desarrollo Regional y Administrativo de Chile (SUBDERE), y que es financiado y apoyado por la Unión Europea. En este proyecto, la descentralización para el desarrollo productivo es uno de los ejes, por lo que se ha colaborado al fortalecimiento de las capacidades de los gobiernos regionales para el diseño de políticas productivas territoriales.
El representante de la CEPAL realizó una charla sobre la gobernanza multinivel para el desarrollo económico, con el propósito de revisar el significado e importancia de este enfoque de coordinación, además de realizar un análisis del contexto institucional chileno en materia de desarrollo productivo y revisar los desafíos que tienen las principales instituciones públicas vinculadas a esta temática en materia de descentralización del fomento productivo.
De esta manera, Dini comenzó su exposición hablando acerca del panorama de incertidumbre económica a nivel mundial, como un escenario en el que Chile tiene importantes desafíos vinculados a la productividad y la concentración.
En esta línea, explicó que la economía y la capacidad productiva en términos del PIB de este país está fuertemente concentrada en la Región Metropolitana. No obstante, también explicó que en materia de PIB per cápita se registra un proceso de convergencia, ya que las regiones que en 1996 marcaban un PIB per cápita menos, son las que han registrado un mayor incremento de esta variable en los siguientes 22 años, como es el caso de las regiones de La Araucanía, Los Lagos y Aysén, territorios que han ido reduciendo las brechas con las regiones más ricas.
En este contexto, se detalló que el panorama institucional chileno en materia de desarrollo productivo está bien articulado, pero escasamente coordinado con lo que ocurre en los territorios, a pesar de existir más de 30 instituciones que se dedican a esta temática. Esta situación ha generado una escasa práctica de trabajo interinstitucional que no permite pensar o construir en conjunto, por ejemplo, con los gobiernos regionales.
A este panorama, debe sumarse el fuerte grado de centralización de recursos en las instituciones más grandes, lo que genera un panorama de las inversiones en desarrollo productivo con marcadas diferencias entre las regiones.
Al respecto, la CEPAL propone un enfoque de coordinación multiactor y multinivel que permita el fortalecimiento de los gobiernos locales y regionales, para el diseño e implementación de estrategias, programas y proyectos regionales de desarrollo productivo.
Un hito importante en el proceso de regionalización de las políticas de desarrollo productivo ha sido la elección de gobernadores regionales. Al respecto, CORFO puede fortalecer la coordinación multinivel, a partir de reformar la acción de las instituciones nacionales, con una política de nuevo modelo de desarrollo que potencie la coordinación interinstitucional y se enfoque más en el logro de metas y desafíos que en la gestión de los instrumentos de fomento.
Asimismo, es fundamental que los gobiernos regionales tengan mayor autonomía y capacidad en desarrollo productivo, incrementando, por ejemplo, el número de profesionales, sus competencias para la gestión de instrumentos de fomento y la asignación de recursos.
En líneas generales, la coordinación multinivel permite que se reconozcan las distintas funciones de cada uno de los actores involucrados y se genere un diálogo que no solo le otorgue mayor poder a un nivel por sobre otro, sino que le permita mantener un espacio de trabajo propio y así fomentar la descentralización de las políticas de fomento productivo.
Este proceso implica un cambio en las relaciones de poder entre las instituciones, específicamente en una transformación de los gobiernos regionales, los que en Chile se han ido consolidando como actor protagónico de las políticas regionales de desarrollo productivo, a partir de la elección popular de los Gobernadores. A esto, la CORFO debe sumarse para intentar dirigir este proceso de una forma tal que el resultado final sea provechoso para la institucionalidad chilena en su conjunto.
Una herramienta que permitiría mejorar la coordinación multinivel en materia de desarrollo económico son las Estrategias Regionales de Desarrollo, impulsadas por los GORE. Se trata de una construcción colectiva con el territorio que genera diálogo con los actores locales, comunidades, gremios, academia, sector privado, etc., para que el escenario en el que se ejecute no esté sujeto a la continuidad de un gobierno en particular.
Para ello, también es necesario reforzar el proceso de traspaso de competencias desde el nivel nacional a los regionales. En este ámbito CEPAL está colaborando con CORFO y las entidades nacionales como SUBDERE y MINECON para reforzar el mecanismo (en si transitorio) de los Comités de Desarrollo Productivo Regional, como un paso hacia la construcción de herramientas regionales de asignación y ejecución de recursos, según la orientación de las respectivas Estrategias Regionales de Desarrollo.