La autonomía de las mujeres se refiere a la capacidad para tomar decisiones libres e informadas sobre sus vidas, de manera de poder ser y hacer en función de sus propias aspiraciones y deseos, en el contexto histórico que las hace posibles (CEPAL, 2011). Es fundamental para garantizar el ejercicio de los derechos humanos en un contexto de plena igualdad y una precondición para que las mujeres participen como sujetos del desarrollo.
Esta fue una de las reflexiones compartidas por Nicole Bidegain Ponte, Oficial de Asuntos Sociales de la División de Asuntos de Género de la CEPAL, en su ponencia. El evento, dirigido a capacitar empresarias, es una iniciativa del programa Mujer Exportasv, del Organismo Promotor de Exportaciones e Inversiones de El Salvador (PROESA), lanzado en mayo de 2022 para empoderar e impulsar el desarrollo económico en mujeres empresarias con potencial exportador.
La Oficial de Asuntos Sociales de la División de Asuntos de Género de la CEPAL recalcó que los compromisos internacionales, tales como el Compromiso de Santiago y la Estrategia de Montevideo, así como la Agenda Regional de Género son clave para la garantía de la autonomía de las mujeres y la igualdad de género. Entre ellos, destacó la Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe, que se llevará a cabo el 7 a 11 de noviembre de 2022, en Buenos Aires, cuyo tema central será “La sociedad del cuidado como un horizonte para una recuperación sostenible con igualdad de género en América Latina y el Caribe”.
Además, Nicole Bidegain Ponte mencionó los avances en términos del aumento del número de disposiciones relativas a la igualdad de género en los acuerdos comerciales, lo que se observa en diversos países de la región, como Chile, Uruguay y Argentina, Brasil, Ecuador, México, el Perú, y Paraguay. Sin embargo, agregó, más allá de esos avances es necesario promover una transversalización de la perspectiva de género en las diferentes disciplinas comerciales.
Finalmente, Bidegain Ponte señaló que el diseño de programas específicos dirigidos a la participación de las mujeres en el comercio internacional, como el programa Mujer Exportasv en El Salvador, es una medida clave para lograr la igualdad de género en el acceso a las oportunidades del comercio internacional. Su creación es de suma importancia para romper las barreras que enfrentan las mujeres que exportan o quieren exportar, producto de los nudos estructurales de la desigualdad de género.
Más información:
Véase la presentación “Avances de la autonomía económica de las mujeres en América Latina y el Caribe”.
