Según estimaciones de las Naciones Unidas, cerca de 2.500 millones de personas -es decir, un tercio de la población mundial- carecen de acceso a servicios modernos de energía. En la Cumbre del Milenio (2000), los países de la ONU acordaron que se deben adoptar medidas urgentes antes de 2015 para reducir esta cifra a la mitad y mejorar, de paso, la situación de pobreza en que viven muchos habitantes del planeta y la creciente contaminación ambiental que el uso indiscriminado de fuentes de energía fósiles ha generado.
Los próximos días 29 y 30 de octubre de 2003 se llevará a cabo la Conferencia Regional para América Latina y el Caribe sobre Energías Renovables en Brasilia, capital de Brasil. Convocada por el Gobierno de ese país, la Conferencia buscará aprobar una Plataforma regional sobre Energías Renovables para ser presentada en la Conferencia Internacional sobre Energías Renovables, que se realizará en Bonn, Alemania, en 2004.
Esta Conferencia Internacional fue propuesta por el Gobierno de Alemania durante la Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible (Johannesburgo 2002), en donde el tema de la energía fue uno de los principales asuntos abordados.
La Conferencia Regional para América Latina y el Caribe sobre Energías Renovables será inaugurada el miércoles 29 de octubre en dependencias del Palacio Itamaraty (sede del Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil), en Brasilia, a las 09:00 horas, y en ella participarán ministros de energía y autoridades responsables del tema de varios países de la región, quienes discutirán a nivel técnico y político las acciones a seguir para mejorar y profundizar el uso de las energías renovables.
A petición del Gobierno de Brasil, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe de las Naciones Unidas (CEPAL) se hará cargo de la Secretaría de la Conferencia y prestará apoyo financiero a las delegaciones participantes, junto con el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y el Gobierno de Alemania. Además, la reunión contará con la colaboración de la Organización Latinoamericana de Energía (OLADE).
