Descripción
Resumen Las acciones orientadas a crear capacidades de gobernabilidad para la gestión del agua son parte ineludible de la agenda de los gobiernos. Todos los países de la región enfrentan los desafíos constantes, lo que implica la necesidad de encontrar fórmulas de legislación y organización capaces de prevenir y solucionar los conflictos crecientes por el uso del agua y la ocurrencia de fenómenos naturales extremos. Paradójicamente mientras los conflictos vinculados al agua se incrementan parece que en algunos países de la región se ha reducido la capacidad relativa que existía para solucionarlos en el pasado. Esto es lo que en este documento se califica como 'Crisis' de gobernabilidad en la gestión del agua. En debates, producto de las numerosas reuniones que se han efectuado sobre el tema del agua en forma reciente, se observa que no existe un rumbo definido, ni teórico ni conceptual, para lograr consensos sobre opciones para mejorar la gestión del agua. Esto da como resultado que, con demasiada frecuencia, cada modificación de autoridad genera a su vez cambios en las formas de gestión del agua. En los últimos diez años se han planteado más modificaciones en las legislaciones de agua, que en todo el siglo pasado. Constantemente se modifican metas, se cambia de personal, o se reestructuran las instituciones encargadas de la gestión del agua. Lamentablemente, a pesar de todos estos esfuerzos, el deterioro de los recursos hídricos sigue en aumento. En este trabajo se señalan los dilemas existentes que se deben resolver, para alcanzar metas de gestión integrada del agua y la forma como los países de la región los están confrontando. Destaca la importancia de buscar soluciones vinculando la organización y el pensamiento individual y colectivo de una sociedad (el lado 'soft' de las ciencias) con el conocimiento técnico–científico (el lado 'Hard' de las ciencias) para encontrar soluciones a los dilemas existentes. Entre los factores que explican la dificultad para mejorar los sistemas de gestión del agua, se encuentra la falta de métodos para diseñar estrategias para transitar paso a paso de una situación existente a una situación deseada. El diseño de estrategias, materializadas en planes de ordenamiento de recursos hídricos, se ha vuelto una práctica poco común desde los años ochenta, comparado con la formulación de planes en la década de los setenta. A pesar de no elaborarse planes, en los países de la región hay una búsqueda casi frenética para lograr metas cada vez más integrales u holísticas, para la gestión no sólo del agua sino de todo el medio ambiente. Los deseos de alcanzar objetivos integrales u holísticos, participativos, interdisciplinarios y democráticos, sin embargo, sólo se logran en base a diseñar y aplicar estrategias consistentes de largo plazo. Contribuye a agravar el panorama la aplicación de ciertos paradigmas pre–establecidos de gestión del agua, sobre todo económicos, que se compadecen poco con la preparación de las condiciones necesarias para aplicarlos. El documento ilustra las observaciones con referencias a situaciones que ocurren o han ocurrido en los países de la región durante los procesos para mejorar la gestión del agua. Aporta además información actualizada sobre aspectos de organización institucional y legislación para la gestión integrada del agua, planificación de los recursos hídricos, y creación y operación de entidades de gestión del agua a nivel de cuencas, así como un análisis exhaustivo de los desafíos que aún deben superarse para pasar de las recomendaciones contenidas en el capítulo 18 del Programa 21 a la acción. Es de esperar que más de un lector, vinculado a los temas de gestión del agua, encuentre reflejadas en las situaciones ilustradas principalmente en recuadros, algunas casi anecdóticas, sus propias experiencias.