Descripción
La capacidad de los regímenes políticos para formular y ejecutar
políticas que respondan al interés común parece ser un factor crucial
para el desarrollo. A menudo las instituciones públicas en América Latina
no están orientadas al bien común. En consecuencia, la mayoría de
los países de la región carece de la preparación adecuada para enfrentar
los desafíos de la integración en el mercado mundial y el desarrollo
basado en el conocimiento. Dos enfoques se han abocado en especial
a la relación entre las instituciones y el desarrollo: la buena gestión de
los asuntos públicos o buena gobernanza (good governance);, propuesta
por el Banco Mundial, y la competitividad sistémica, introducida por el
Instituto Alemán de Desarrollo. Echando mano a elementos de ambos
enfoques, este artículo propone un marco conceptual para evaluar las
tendencias de los sistemas políticos a bloquear o a promover las reformas.
Este nuevo enfoque, denominado de gobernanza sistémica, se basa en la capacidad de tomar y aplicar decisiones en función del interés
común, en todos los niveles del sistema político. Para promover reformas
de segunda generación es preciso tener en cuenta el carácter sistémico de la gobernanza.