Comunicado de prensa
La cooperación Sur-Sur y la cooperación triangular proporcionan un nuevo modelo de colaboración entre iguales que permite proteger los intereses de los países de renta media, fortalecer la participación de las naciones en desarrollo en los foros globales de cooperación fiscal y abordar la competencia fiscal dañina a través de programas regionales integrados, afirmó este jueves 4 de mayo el Secretario Ejecutivo Adjunto de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Antonio Prado.
El alto funcionario de la CEPAL participó en Ciudad de Panamá en el Foro de lanzamiento de Panamá Coopera, un Plan Nacional de Cooperación para el desarrollo sostenible que considera la participación y coordinación de actores múltiples a nivel local, regional e internacional con el fin de conectar oportunidades políticas, institucionales, sociales y económicas con miras al cumplimiento de la Agenda 2030.
En un saludo enviado por video a los asistentes a la reunión, la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena, destacó que Panamá “ha tenido en los últimos años una visión relevante de las necesidades del mundo multilateral y avizora un liderazgo regional de gran magnitud”.
Añadió que con Panamá Coopera, el país “manifiesta su voluntad de adecuar los estándares de la cooperación a las nuevas tendencias y ocupar un lugar diferenciado en el sistema internacional de cooperación”.
Durante su presentación, Antonio Prado subrayó que el financiamiento para el desarrollo, desde la perspectiva de América Latina y el Caribe, requiere movilización de recursos internos por lo que es indispensable afrontar la elusión y evasión fiscal, que en 2015 costó a la región 340.000 millones de dólares (6,7% del PIB), y combatir los flujos ilícitos vinculados al comercio exterior.
Prado afirmó que, adicionalmente, se requiere abordar la transición de los centros financieros extraterritoriales progresivamente; multilateralizar la cooperación internacional en materia de políticas fiscales para, entre otros, terminar con la competencia fiscal entre los países, e incluir los recursos movilizados por los bancos nacionales y subregionales de desarrollo.
Recordó que la Agenda 2030 es universal, indivisible, integral y civilizatoria pues propone reconciliar políticas para eliminar la pobreza, a favor de la igualdad y la sostenibilidad ambiental. En esa línea, destacó que sólo con cooperación multilateral se lograrán corregir asimetrías y sentar las bases de un sistema internacional abierto y estable que imponga menores restricciones a las decisiones nacionales.
En la jornada inaugural, realizada en la víspera, Prado afirmó que con su plan nacional, Panamá busca “liderar con el ejemplo” en el concierto internacional.
Destacó que el plan de Panamá tiene una premisa que la CEPAL valora y que es igualar para crecer y crecer para igualar. “Es fundamental entender que el crecimiento incluyente es el que permite su propia sostenibilidad no solamente económica sino también social”, concluyó.