Como una forma de sensibilizar y concientizar al personal sobre las contribuciones que hacen las personas con discapacidad a las sociedades y sobre los desafíos que enfrentan diariamente para hacer esos aportes se llevó a cabo del 3 al 7 de diciembre de 2018 la “Semana de la inclusión” en la sede central de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) en Santiago, Chile.
La semana de actividades se inició el lunes 3 de diciembre, Día Internacional de las Personas con Discapacidad, con la exhibición del documental chileno “Último año”, de los cineastas Viviana Corvalán Armijo y Francisco Espinoza, el cual aborda los desafíos educativos de la comunidad sorda en el país.
“Las personas con discapacidad conforman una población muy heterogénea, que vive realidades y experiencias diferentes. Sin embargo, comparten, lamentablemente, un denominador en común: a diario ven sus derechos vulnerados”, explicó Laís Abramo, Directora de la División de Desarrollo Social de la CEPAL, en el acto inaugural de la semana.
Se estima que aproximadamente 12% de la población de América Latina y el Caribe tiene alguna discapacidad, porcentaje que equivale a unos 70 millones de personas, indicó Abramo, quien valoró algunos avances, como la amplia ratificación de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.
“El anclaje en un concepto tradicional y biomédico de la discapacidad, que ve a la discapacidad desde un enfoque caritativo y asistencialista, alejado del enfoque de derechos, es una de las barreras más importantes que enfrentan las personas con discapacidad para su plena inclusión”, sostuvo la funcionaria de la CEPAL.
La semana incluyó diversas actividades como una feria inclusiva con venta de productos artesanales, la recolección de libros y juguetes y una colecta para recaudar fondos. Participaron la Fundación Luz (que trabaja con población ciega y de baja visión), la Fundación Incluir (que se dedica a la inclusión laboral de personas con capacidades intelectuales diferentes), la Fundación Crescendo (que atiende a adultos con discapacidad intelectual leve y moderada), la Organización Autismo por Ñuñoa y la CIDEVI (que gestiona una escuela y un centro de rehabilitación para personas con discapacidad visual y sordociegas).
La Fundación Luz también ofreció servicios de masoterapia y deleitó al personal de la CEPAL con el repertorio de su Orquesta Sonidos de Luz, que se presentó el viernes 7 de diciembre en los patios del edificio.
Asimismo, la Biblioteca Hernán Santa Cruz de la CEPAL convocó a los funcionarios de la Comisión en Santiago a vivir una experiencia multisensorial a través de diversos ejercicios que buscaban sensibilizar respecto a los desafíos cotidianos que enfrentan las personas con discapacidad.
“La educación es un campo fundamental para fomentar la inclusión de las personas con discapacidad. Muchos derechos individuales, especialmente aquellos asociados al trabajo decente y al acceso a la seguridad social, están fuera del alcance de quienes han sido privados de una educación de calidad. Nuestras sociedades solo avanzarán en la senda del desarrollo sostenible cuando haya una verdadera inclusión de todos y todas”, resumió Laís Abramo.
