Description
Para México, la Unión Europea significa el segundo socio comercial más importante, solo después de los Estados Unidos, así como la segunda fuente de inversión, al tiempo que dicho bloque regional constituye su principal donante en materia de cooperación internacional. Las relaciones de cooperación entre México y la Unión Europea, distantes todavía a mediados del siglo pasado, han experimentado una importante transformación en la medida en que ambos actores han implementado una serie de medidas de control, estabilidad e influencia macroeconómicas, incluso frente a los vaivenes de la economía mundial y las crisis financieras internacionales de las últimas décadas. De esta forma, ambas partes, han desarrollado diversas estrategias de inserción y competitividad en mercados mundiales, como la integración y ampliación regional, en el caso de la Unión Europea, y de la diversificación comercial con terceros países y bloques regionales, en el caso de México. A través del Acuerdo para Concertación Política, Asociación Económica y Cooperación, también conocido como "Acuerdo Global", México y la Unión Europea han consolidado mecanismos de vinculación cada vez más institucionalizados para la interlocución, negociación y cooperación entre ambas partes.La experiencia mexicana sin duda es relevante en la materia, debido a que su relación con la Unión Europea le ha permitido consolidar una estrategia de diversificación de mercados, que antes la tenía de manera muy incipiente, y de aprovechar de manera efectiva los recursos que todavía son canalizados a través de la Cooperación Internacional para el Desarrollo. Indudablemente la experiencia mexicana con la Unión Europea ha derivado en mejores prácticas en materia de cooperación internacional para el desarrollo, las que podrían ser replicados en otros países latinoamericanos de igual o menor nivel de desarrollo.