Description
En vista de las persistentes brechas de acceso a los servicios de telecomunicaciones, los países de la región establecieron políticas de acceso universal, varias de las cuales se fundamentaron en la constitución de fondos dedicados. En la actualidad, el debate está dominado por las políticas de expansión de la cobertura de la banda ancha, que requieren ingentes recursos para poder ser implementadas. Por su parte, la banda ancha puede permitir que el acceso a los servicios de telecomunicaciones por parte de los pobres y excluidos, generalmente aquellos sujetos de las políticas de acceso universal, dé un salto y rápidamente acorte, si no elimine, las brechas existentes. De cara a estas constataciones, es necesario examinar cómo las políticas de desarrollo de la banda ancha en los países de la región se relacionan, o sostienen, en las políticas sobre acceso universal de la década pasada. De particular relevancia, es la manera cómo los diferentes países que cuentan con fondos dedicados al acceso universal, planean utilizar esos recursos para atender los objetivos de universalización de los servicios de banda ancha. Este documento parte de constatar la evidencia sobre la densidad de varios servicios de telecomunicaciones. Los datos muestran que los países de América Latina y el Caribe se encuentran rezagados en el acceso a Internet y la subscripción de banda ancha, respecto de los Estados Unidos, Corea y el Reino Unido, que serán usados como puntos de comparación en este estudio. Seguidamente, se revisa de manera resumida las lecciones del estudio de REGULATEL de 2006, que sentó las bases de nuestro conocimiento sobre las políticas, planes y recursos dedicados a los planes de universalización de los servicios de telecomunicaciones. Se dedica la sección 3 a revisar tanto los beneficios que aporta la banda ancha al desarrollo económico, los que se extienden a todos los sectores de la actividad económica y social; así como los planes que han emprendido EEUU, Coreo y el Reino Unido. En la sección 4, se presenta la información recogida específicamente para este estudio, la que muestra que no ha habido grandes cambios en las fuentes de financiamiento o el objeto de los FASU, allí donde existen. Al mismo tiempo, los países de la región han comenzado a incluir objetivos de ampliación de cobertura de la banda ancha, sea a entidades públicas o en zonas remotas del territorio.