Descrição
ResumenLa movilidad de personas entre el Estado Plurinacional de Bolivia y la Argentina -en particular, la migración desde el primer país hacia el segundo- es de larga data y antecede a la formación de ambos Estados nacionales. Las ocupaciones (semi) rurales de la economía regional fronteriza argentina fueron foco de atracción para personas de origen boliviano hasta su declive en la década de 1960, cuando comienza a observarse la metropolización de esta dinámica migratoria. Con todo, subsiste en la frontera argentinoboliviana la impronta de estos procesos, a los que se suman movimientos recientes. En la actualidad, se registra en la zona -postergada socioeconómica y políticamente- una amplia gama de situaciones migratorias y de movilidad que incluyen la residencia habitual, la migración laboral temporaria para la zafra, la migración laboral fronteriza, los movimientos de los abastecedores (paseros/as y vendedores/as ambulantes) y consumidores fronterizos, el tránsito hacia otros destinos en el país y la movilidad indígena. Las fuentes más confiables de información estadística sobre la población migrante en la Argentina permiten captar parte de esta población. Desde una mirada atenta al género, muestran que se trata de poblaciones feminizadas con un predominio en edades reproductivas y revelan la formación de familia temprana, la maternidad precoz y bajos alcances educativos de las adolescentes. Los datos dan cuenta de condiciones desfavorables de vivienda de la población de origen boliviano en zona de frontera y de un limitado acceso a los servicios de salud, aportando indicios de la alta vulnerabilidad general en la que se encuentran las mujeres jóvenes inmigrantes en la frontera. Las estadísticas disponibles no permiten el análisis específico en profundidad de la situación de morbilidad y mortalidad de los inmigrantes pero los escasos estudios cualitativos existentes identifican un abanico de problemáticas salientes en materia de salud que afecta a las mujeres migrantes: obstáculos estructurales y prácticas discriminatorias en el acceso a la salud en general de la población boliviana, especiales trabas para acceder a programas de salud materno-infantil, obstáculos para la inscripción de los hijos y dificultades para acceder al tratamiento del VIH/SIDA. Como temas vinculados a la violencia de género aparecen el ingreso y/o tráfico de personas adultas, niñas y adolescente víctimas de explotación y/o trata mayormente laboral, las condiciones de detención de mujeres acusadas de tráfico de droga en la frontera y la violencia ejercida por los agentes de control migratorio sobre las mujeres bolivianas durante las requisas fronterizas. En cuanto a la población joven, una problemática que involucra temas de salud es la de los riesgos de trabajo de los paseros. Si bien, desde el punto de vista normativo, tanto en el plano migratorio como de la salud, el Estado Plurinacional de Bolivia y la Argentina han ratificado los instrumentos internacionales de derechos humanos que brindan amplia protección a las poblaciones bajo foco, dicha protección resulta de carácter general y, en la práctica, no se aplica efectivamente a sus destinatarios. Los acuerdos bilaterales que involucran temas de salud han apuntado al control sanitario fronterizo antes que al derecho a la salud de la población migrante. De hecho, la salud de la población migrante en frontera no ha sido recogida por política específica alguna; su abordaje es de momento residual, subproducto de los intentos por erradicar enfermedades endémicas.El funcionamiento de las iniciativas, programas y proyectos en materia de salud y migraciones llevados a cabo por gobiernos, organismos internacionales y organizaciones de la sociedad civil en la frontera no han sido sistemáticos ni regulares sino implementaciones esporádicas de acciones nacidas de inquietudes extra-locales y ejecutadas por agentes sin inserción local real. Sumadas a la temporalidad reducida y al financiamiento acotado, estas deficiencias atentan contra la viabilidad y sustentabilidad de las iniciativas tendientes a la promoción de los derechos humanos de las poblaciones migrantes en frontera.