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Ingresos y gastos de los gobiernos departamentales de Uruguay

12 June 2015|Briefing note

Informe de la Oficina de la CEPAL en Montevideo analiza la evolución de los ingresos y gastos de los gobiernos departamentales en los últimos 24 años

En el marco de un convenio de cooperación entre la CEPAL y la Oficina de Planeamiento y Presupuesto del Uruguay, la Oficina de la CEPAL en Montevideo sistematizó y analizó información sobre egresos e ingresos de los gobiernos departamentales en el período 1990 – 2013, que cubre casi completamente cinco períodos de administraciones de los 19 departamentos del territorio uruguayo. El trabajo fue presentado el pasado miércoles 10 de junio en el ciclo de Conferencias "La gestión eficiente en los gobiernos departamentales", organizado por la Dirección de Descentralización e Inversión Pública de OPP. 

Los resultados del análisis muestran que los ingresos departamentales pasaron de representar 2,4% del PIB nacional en 1990 a 3,2% en 2013. Durante los primeros años del siglo XXI estos ingresos alcanzaron un máximo de 3,6% del PIB. Dos tercios del total corresponden a las intendencias del interior del país.

Salvo en los años de la crisis económica del país (1999-2004), en promedio los resultados fiscales de las Intendencias han sido equilibrados, aunque el informe muestra una fuerte evidencia a favor de existencia de ciclo electoral, puesto que en los años previos a las elecciones el resultado fiscal global es claramente deficitario.

El informe muestra como durante el período analizado, las transferencias del gobierno central han aumentado su importancia en los ingresos municipales, reduciendo la importancia de los ingresos recaudados localmente. Las transferencias explicaban el 10% de los ingresos durante la década del 90, aumentaron a 20% durante la crisis de 1999-2003 y en 2013 representan el 30%. En el interior las transferencias alcanzan el 40% aunque ya son el 50% o más de los ingresos en la mitad de los departamentos.

En los ingresos por recaudación propia, se observa un cambio en las composición. Los impuestos pagados por el sector productivo (Contribución Inmobiliaria Rural y el Impuesto a los Remates de Semovientes) redujeron su importancia a costa de los impuestos más relacionados al consumo, como la Patente de Rodados y la Contribución Inmobiliaria Urbana.  Este último impuesto tiene una importancia creciente en los departamentos costeros y turísticos.