Description
La revolución científica y tecnológica en marcha obliga a idear nuevas formas de región, superando antiguas restricciones de tamaño y contigüidad: la complejidad estructural es ahora el factor crucial. La generación de estructuras regionales en el ámbito nacional y supranacional exige flexibilidad, dados los rápidos cambios en el entorno regional, la globalización de las economías y las exigencias de conformación democrática de las regiones. Aquí se propone una nueva tipología que distingue entre regiones pivotales, correspondientes a las menores unidades de la actual división políticoadministrativa que tengan suficiente complejidad; regiones asociativas, conformadas por la unión política voluntaria entre a lo menos una región pivotal y una o más unidades político-administrativas colindantes, y regiones virtuales, conformadas por acuerdos tácticos entre regiones pivotales o entre regiones asociativas sin que medie contigüidad. A fin de alcanzar la flexibilidad requerida, se propone reemplazar los esfuerzos dirigistas y del centro hacia abajo por iniciativas desde la base social que permitan la configuración regional de territorios contiguos y también no contiguos, incluso de distintos países. La sección I del artículo reseña los escasos resultados de los esfuerzos de regionalización en América Latina durante los últimos cincuenta años y plantea interrogantes fundamentales respecto a la posibilidad de construir la realidad; la sección II examina las características estructurales que deben tenerse en cuenta al definir las regiones (principalmente la complejidad);; la sección III propone tres nuevos tipos de regiones, y la sección IV plantea que debe mantenerse vigente la idea de la construcción política y social regional aplicada ahora a las regiones asociativas y virtuales.