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La CEPAL organizó del 14 al 16 de noviembre de 2023 el primer encuentro de expertos de alto nivel en el marco del proyecto “Integración y gobernanza innovadora de la biodiversidad en América Latina y el Caribe: retos y oportunidades para la planificación del desarrollo, la agricultura sostenible y el cambio climático”. Su objetivo fue identificar elementos clave para la implementación y seguimiento tempranos del Marco Mundial de Biodiversidad Kunming-Montreal mediante una visión multidimensional.
En detalle, se busca identificar la relación y sinergia del Marco con los procesos de planificación y seguimiento de las políticas públicas y público-privadas relacionadas con el desarrollo sostenible, de cambio climático, de la transición del sector agricultura hacia la sostenibilidad, abordando enfoques de género, de derechos y de pueblos indígenas y comunidades locales.
A medio camino de la implementación de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, se ha estimado que únicamente cerca del 15% de las metas va por buen camino; mientras que casi la mitad está moderada o severamente fuera de ser alcanzadas; y un 30% no ha visto avances o incluso han retrocedido. De esta forma, para alcanzar los desafíos de la Agenda 2030 se necesitan cambios estructurales en el funcionamiento de las economías y formas de producción, así como en la planificación y seguimiento, que logren reacoplar las tres dimensiones del desarrollo sostenible: social, económico y ambiental. Se debe reconocer y abordar concretamente la interdependencia y el potencial transformador que emerge de combinar estas tres dimensiones de forma simultánea, como propone el Marco Mundial de Biodiversidad.
“La biodiversidad es uno de los temas más rezagados dentro de los compromisos mundiales, y sin embargo, es uno de los que tiene más impactos en la sostenibilidad”, indicó Carlos de Miguel, Oficial a Cargo de la División de Recursos Naturales, en la inauguración del evento.
El Marco Mundial de Biodiversidad Kunming-Montreal, aprobado en diciembre pasado como hoja de ruta hasta 2030, compromete a llevar a cabo cambios transformadores que promuevan la igualdad, reacoplando las tres dimensiones del desarrollo sostenible con especial énfasis en aspectos ambientales y climáticos, sin minimizar las dimensiones social y económica. El Marco también pone un énfasis especial en temas relacionados con la agricultura (al menos en trece metas), en herramientas para su implementación y seguimiento temprano, y brinda oportunidades relevantes para la planeación y el ordenamiento del territorio.
De hecho, en la reciente Conferencia de las Partes de Biodiversidad (COP 15) en Nairobi, Kenia, se ha presentado un proyecto de marco de seguimiento para medir el avance en su implementación. De esta forma, en esta etapa, cobra especial relevancia consolidar algunos de sus indicadores de cabecera, su evaluación y su seguimiento, para asegurar su implementación. Así, es necesario apoyar al fortalecimiento de las capacidades para producir la información que permita la evaluación y seguimiento de los procesos que se llevarán a cabo en la implementación temprana del Marco Kunming-Montreal.
“Para que una política pública tenga éxito se necesita que la sociedad perciba su valor, apoyo político, y la capacidad que tengamos para implementar las acciones públicas”, indicó Alicia Williner, experta del Instituto Latinoamericano y del Caribe de Planificación Económica y Social (ILPES), de la CEPAL, quien participó en el encuentro. De esta forma, el evento intenta identificar los elementos que permitan que estas condiciones de logren para implementar el Marco Mundial de Biodiversidad en la región en forma temprana.
El evento fue un punto de encuentro para cerca de 35 profesionales nacionales e internacionales, que representan a los más diversos sectores, incluyendo gobierno, sector privado, organismos multilaterales, sistema de las Naciones Unidas, academia y sociedad civil. Además, el evento integró dististintas áreas dentro de la misma CEPAL, incluyendo al ILPES, y las divisiones de Estadísticas, Desarrollo Sostenible y Asentamientos Humanos, Desarrollo Productivo y Empresarial, y Recursos Naturales.
“Para generar información, además de tener buenos datos, tenemos que transversalizar la labor entre todas nuestras unidades, sectores, agencias y ministerios”, señaló Georgina Alcantar, de la División de Estadísticas de la CEPAL.
De esta forma, como órgano regional de las Naciones Unidas, la CEPAL apoya la transversalización de la biodiversidad y la implementación y seguimiento tempranos del Marco Mundial de Biodiversidad, que de hecho, es parte de un compromiso conjunto de las y los secretarios ejecutivos de las cinco comisiones regionales en la decimoquinta conferencia de las partes del Convenio de Diversidad Biológica en Montreal.
Proceso de fomento a la implementación del Marco en la región
Previo al encuentro, La CEPAL y el proyecto Apoyo al Marco Mundial de Biodiversidad Post-2020 de la Unión Europea, desarrollaron los diálogos virtuales de biodiversidad, con personas de la sociedad civil organizada, del sector privado y de gobierno, para abordar los retos y las oportunidades para la planificación del desarrollo y la agricultura sostenibles. Ello, considerando el uso de herramientas integrales de beneficios multidimensionales identificadas por la CEPAL, como la integración transectorial de la biodiversidad y la gobernanza para el cambio transformativo a favor de la biodiversidad (Alvarado, Tambutti y Rankovic 2022; Catacora-Vargas y otros, 2022).
Los diálogos analizaron la relevancia de las 23 metas del Marco de Biodiversidad Kunming-Montreal para su implementación en los países de la región, desde la perspectiva de la planeación del desarrollo del ILPES (multisectorial, multiactor, multiescalar e intertemporal).
Como resultado de los diálogos se concluyó que las metas 1 (de planeación territorial para frenar el cambio de uso de tierra/mar), 8 (minimizar el impacto del cambio climático e impulsar efectos positivos para la biodiversidad), 10 (agricultura, acuicultura, pesca y silvicultura sostenible), 14 (integración de la biodiversidad y sus múltiples valores en todos los sectores) y 18 (la eliminación gradual o reformulación de los incentivos perjudiciales a la biodiversidad y multiplicación de los positivos) tienen un fuerte potencial para llevar a cabo los cambios estructurales que se requieren para avanzar en las tres dimensiones del desarrollo sostenible (económica, social y ambiental). De esta forma, el encuentro de expertos busca identificar elementos clave para avanzar en esta dirección.