Comunicado de imprensa
En el marco del Proyecto de la Cuenta de Desarrollo de las Naciones Unidas “Sistemas de salud resilientes con cobertura universal en América Latina y el Caribe”, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) brindó asistencia técnica al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para la estimación del costo de la prestación de servicios de salud gratuitos a la población sin seguridad social laboral, con el fin de avanzar en la universalización de la salud en México. En este contexto, el 12 de marzo de 2024, se llevó a cabo una mesa de trabajo en las instalaciones del IMSS en la Ciudad de México, cuyo objetivo fue presentar la metodología creada por el IMSS y validada por CEPAL para estimar los costos de expandir los servicios de atención de salud del IMSS-Bienestar a la población sin seguridad social laboral, con enfoque en el estado de la Ciudad de México. Esta instancia contó con la participación de representantes del IMSS así como de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México. La sesión se organizó en dos partes; en la primera, se presentó la metodología aplicada a la realidad de la Ciudad de México, mientras que en la segunda parte se reflexionó sobre los desafíos que podrán surgir en las próxima fase de implementación de la expansión de la cobertura de los servicios de atención de salud desde la Secretaría de Salud de la Ciudad de México al IMSS-Bienestar.
Antecedentes
La salud es un derecho humano y una de las garantías básicas de los sistemas de seguridad social, manifestándose como un elemento constitutivo del bienestar integral de las personas. Sin salud, el ejercicio de otros derechos sociales se ve obstaculizado y, en consecuencia, se impide el desarrollo social. Para que las personas puedan ejercer su derecho a la salud es necesario avanzar en su acceso universal. Sin embargo, los sistemas de salud de América Latina y el Caribe padecen una serie de debilidades estructurales que, junto con una insuficiente articulación con los sistemas de protección social, obstaculizan dicho acceso y se traducen en problemas de suficiencia en el acceso, ineficiencia, dificultades de coordinación, ausencia de solidaridad y situaciones de desigualdad, obstaculizando un efectivo acceso universal a la salud (CEPAL, 2022; CEPAL/OPS, 2021; CEPAL/OPS, 2020).
Ante esta situación, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) destaca la importancia de mejorar la capacidad de los países de la región para diseñar, adaptar e implementar estrategias y políticas orientadas a avanzar hacia sistemas de salud universales, integrales, sostenibles y resilientes, que permitan garantizar el acceso a la salud de toda la población, sin dejar a nadie atrás.
México se ha distinguido por sus progresos en la implementación de medidas para ampliar la cobertura de los servicios de atención de salud a la población sin seguridad social laboral. En agosto de 2022, el gobierno federal inauguró el IMSS-Bienestar, un organismo público descentralizado cuya misión es proporcionar atención médica y hospitalaria a quienes no están afiliados a instituciones de seguridad social en estados federales con convenios activos. Este proceso implicó la transferencia de recursos humanos, financieros y de infraestructura en salud de las Secretarías de Salud estatales a este organismo, con el objetivo de universalizar la atención médica y garantizar medicamentos gratuitos para la población sin seguridad social laboral.
La creación del IMSS-Bienestar como Organismo Público Descentralizado (OPD) implicó definir la necesidad de recursos para otorgar los servicios de acuerdo con los estándares de atención actuales del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y estimar la brecha potencial de recursos por entidad federativa. De esta manera, el IMSS asumió el compromiso de estimar el costo de la universalización de los servicios de salud, atención médica y medicamentos gratuitos para la población sin seguridad social laboral, a través del modelo del IMSS-Bienestar OPD.
En este marco, la CEPAL realizó un trabajo conjunto con el IMSS para validar su metodología para estimar el costo de la prestación de servicios gratuitos a tres poblaciones: sin seguridad social laboral, en situación de pobreza y en situación de pobreza extrema, así como también su aplicación a un conjunto de las entidades federativas que tienen convenio vigente con el IMSS-Bienestar OPD. Este proceso permitió identificar particularidades de la implementación de la metodología en los diferentes estados, avanzando así hacia la consolidación del modelo de costeo del IMSS, el cual se ha estado aplicando a las entidades federativas que han o vayan a establecer convenio con el IMSS-Bienestar OPD.
La metodología desarrollada por el IMSS para estimar los costos anuales totales de ampliar los servicios a la población abierta contempló dos métodos: el método de costeo de techo y el método de costeo de piso. En ambos enfoques, se toma en cuenta la población que se pretende cubrir y los costos unitarios actuales del IMSS para la atención de sus derechohabientes. La brecha financiera de la expansión de los servicios se calcula restando el monto de recursos que se transferirían desde cada entidad federativa, con la que se tenga convenio, de los costos totales estimados de ampliar la atención según cada método. La asistencia técnica otorgada desde CEPAL concluye que la metodología es adecuada para estimar brechas y supuesto, cumpliendo con criterios de rigurosidad, transparencia y replicabilidad.