Los ensayos clínicos son una parte fundamental dentro del proceso de generación de nuevos medicamentos y representan la mayor parte de los costos totales de investigación y desarrollo asociados a dicho proceso.
La posibilidad de que un país participe activamente en ensayos clínicos conlleva una serie de potenciales beneficios tanto sociales como económicos. Se genera conocimiento y experiencia sobre nuevos tratamientos y, desde la perspectiva del paciente, facilitan su acceso a tecnologías y medicamentos de vanguardia. Además, abren oportunidades a los investigadores para ser parte de redes internacionales de colaboración -fortaleciendo sus capacidades en I+D-, y a las instituciones, gracias a la experiencia adquirida, a mejorar sus estándares y protocolos de cuidados médicos.
De los 123 países que actualmente ejecutan al menos un ensayo clínico, Estados Unidos lidera el número de estudios a nivel mundial, seguido por China, España, Francia y Reino Unido. En el caso de América Latina, lideran Brasil, Argentina, México y Chile, pero la cifra de investigaciones en estos países es significativamente menor en comparación con las naciones europeas de poblaciones similares. En términos proporcionales, Chile tiene la mayor cantidad de estudios clínicos por millón de habitantes, seguido de Argentina, Panamá, Costa Rica y Colombia.
Se estima que en la región tenemos la capacidad de crecer hasta cuatro veces en el número de ensayos clínicos, pero para que esto sea una realidad es fundamental seguir el ejemplo de países referentes y aunar esfuerzos para construir una comunidad que impulse la adopción de elementos facilitadores y la disminución de barreras para su ejecución.
Este seminario organizado por CEPAL y la Cámara de Innovación Farmacéutica de Chile (CIF), tiene como objetivo relevar los impactos económicos y sociales de los ensayos clínicos, así como determinar los desafíos y estrategias conjuntas que deben ser abordadas para fomentar su desarrollo en Chile y en la región.