Es necesario avanzar en la diversificación productiva y comercial para que las mujeres tengan más y mejores oportunidades económicas, sostuvo CEPAL

En los países de la Alianza del Pacífico es clave promover la participación económica de las mujeres rurales en los encadenamientos productivos regionales para impulsar una recuperación transformadora con igualdad. Esta fue una de las reflexiones compartidas por Nicole Bidegain Ponte, Oficial de Asuntos Sociales de la División de Asuntos de Género de la CEPAL, durante su moderación en el panel de alto nivel “Políticas y estrategias para el empoderamiento económico de las mujeres rurales en los países de la Alianza Pacífico” del Primer Encuentro Ministerial sobre Emprendimiento y Autonomía Económica de las Mujeres de la Alianza del Pacífico. El encuentro se realizó el 5 de agosto de 2022 y fue organizado por el Grupo Técnico de Género de la Alianza del Pacífico.

Además, la Oficial de Asuntos Sociales de la División de Asuntos de Género recalcó el rol de los Ministerios y mecanismos para el adelanto de las mujeres para impulsar la transversalización de la perspectiva de género en las políticas comerciales y propiciar la cooperación regional. Destacó que la Alianza del Pacífico, a través de su Grupo de Trabajo de Género, es pionera en este sentido.

Este panel contó con la participación de Gheidy Gallo Santos, Consejera Presidencial para la Equidad de la Mujer de Colombia; Diana Mirian Miloslavich Tupac, Ministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables del Perú: Luz Vidal Huiriqueo, Subsecretaria de la Mujer y Equidad de Género de Chile; y Luz María de la Mora, Subsecretaria de Comercio Exterior de la Secretaría de Economía de México.

Nicole Bidegain Ponte también participó como panelista en el panel “¿Por qué apostarle a Políticas Económicas y de Comercio Exterior con enfoque de género?”, junto a representantes de entidades multilaterales. En ese marco, hizo una presentación sobre “Desafíos para la autonomía económica de las mujeres en el comercio exterior en países de la Alianza del Pacífico”.

Según la Oficial de Asuntos Sociales de la División de Asuntos de Género, la pandemia profundizó los nudos estructurales de la desigualdad de género en América Latina y el Caribe, a lo que se suman nuevas incertidumbres y vaivenes en el comercio internacional derivados de la guerra en Ucrania. Si bien la región transita un proceso de recuperación, este es desigual. En este contexto, es clave impulsar políticas económicas y de comercio exterior con enfoque de género para fomentar la coherencia de las políticas y evitar el trade-off entre igualdad de género, sostenibilidad e inserción comercial.

Destacó que según los datos de CEPAL, la proporción de mujeres empleadas en el sector exportador en los países de la Alianza del Pacífico es superior al promedio de América Latina (16,7% frente a 12,7%). Desde una mirada sectorial, la agricultura y la agroindustria representan, respectivamente, el 10,3% y 7,1% del empleo asociado a las exportaciones para las mujeres. Sin embargo, el peso de estas actividades puede estar subestimado dada la invisibilidad del trabajo de las mujeres en la agricultura familiar, que muchas veces se considera una extensión del trabajo doméstico no remunerado. En agricultura y agroindustria en la Alianza del Pacífico, por ejemplo, 27,6% de las trabajadoras son trabajadoras familiares auxiliar no remuneradas.

Además, para las mujeres rurales, productoras y empresarias la expansión de sus emprendimientos más allá de las fronteras nacionales se torna más difícil, ya que suelen concentrarse en empresas de menor tamaño y afrontan brechas de género en el acceso a los recursos productivos, al financiamiento, la tecnología y los mercados. Asimismo, las mujeres rurales suelen tener una mayor carga de trabajo no remunerado en comparación con las mujeres y hombres urbanos.

En base a este panorama, Nicole Bidegain Ponte concluyó su intervención destacando la importancia de los compromisos internacionales y de la Agenda Regional de Género para avanzar hacia la diversificación productiva y comercial en sectores con más y mejores oportunidades económicas para las mujeres. En este sentido la Estrategia de Montevideo propone alinear las políticas comerciales con los derechos de las mujeres y el Compromiso de Santiago desarrolloar programas para la generación de empleo de calidad y emprendimientos liderados por mujeres en el comercio internacional, realizar evaluaciones de impacto de género de políticas comerciales y cooperar para evitar la competencia nociva entre países y proteger los derechos laborales de las mujeres.

Finalmente, hizo un llamado a participar en la XV Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe, que se llevará a cabo el 7 a 11 de noviembre de 2022, en Argentina, cuyo tema central será “La sociedad del cuidado como un horizonte para una recuperación sostenible con igualdad de género en América Latina y el Caribe”. En ese marco, se abordarán cuestiones vinculadas con la autonomía económica de las mujeres y su participación en sectores productivos y comerciales.

Más información:

Véase la presentación “Desafíos para la autonomía económica de las mujeres en el comercio exterior en países de la Alianza del Pacífico”.

Véase la transmisión en Facebook.