La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), a través de la Unidad de Economía del Cambio Climático de la División de Desarrollo Sostenible y Asentamientos Humanos, con el apoyo del programa EUROCLIMA+, desarrolló recientemente el estudio “Modelamiento de los efectos macroeconómicos de la transición a la economía circular en América Latina, Los casos de Chile, Colombia, México y el Perú”. El reporte presenta una propuesta para la modelación de los efectos de la economía circular sobre algunas variables macroeconómicas, así como un análisis de las implicancias de la Economía circular en los cuatro países de la Alianza del Pacífico y a la vez, entrega una herramienta que permite realizar la implementación del modelo en otros países de la región.
Los resultados de las simulaciones revelan que, en un escenario conservador en donde se reduce el uso de plástico en 8% y el uso de cemento, materiales metálicos y de energía en un 5%, para 2030 se obtendrían beneficios económicamente relevantes, como incrementos en el PIB entre 0,9% y 2,2%, así como aumentos en el empleo entre 1,2% y 2,1%. También se producirían cambios en las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), como reducciones de 7,3% en Chile, de 1,5% en Colombia y México, y un incremento de 0,4% en el caso de Perú.
El reporte revela que la probabilidad de incrementos en las emisiones crece en la medida que los efectos sobre el PIB son más altos, por lo que la economía circular se vuelve una alternativa interesante para lograr una recuperación verde y transformadora, en donde se logra un mayor crecimiento contribuyendo al medio ambiente.
El modelamiento fue aplicado con los datos por país en 12 sectores: Agricultura, ganadería y silvicultura; Minería y petróleo; Industria liviana (Alimentos, textil y confección, cuero y calzado, papel e impresos, artículos de madera, industria farmacéutica); Industria pesada (Industria química, aparatos eléctricos, maquinaria y equipo, vehículos y material de transporte); Plástico y afines; Materiales metálicos; Materiales de construcción; Energía eléctrica; Construcción; Combustibles fósiles derivados del petróleo; Manejo de residuos y materiales; y Comercio, servicios y transporte.
Según el modelamiento, el impulso a los mecanismos de responsabilidad extendida del productor y la investigación tecnológica servirán para viabilizar el logro de las metas de reducción y los beneficios económicos de la economía circular en los países analizados, que han ido avanzando en legislación e implementación de instrumentos de política principalmente con estrategias de fomento a la producción y consumo responsable y a la reincorporación de materiales a los ciclos productivos, entre otros.
Este estudio se desarrolló como parte del aporte entregado por la Unión Europea, a través de su programa EUROCLIMA, a Chile en su rol de Presidencia de la 25ª Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC), para impulsar la acción climática, tanto en Chile como en América Latina y el Caribe.
El informe completo se encuentra en el siguiente enlace: “Modelamiento de los efectos macroeconómicos de la transición a la economía circular en América Latina, Los casos de Chile, Colombia, México y el Perú”.